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El doctor Villa defiende su inocencia en un caso de supuesto robo de bebés

El médico, imputado por tres delitos, ha declarado ante la jueza que investiga el caso para defender que la muerte de un bebé en 1964 pudo producirse por otitis

Algo más de una hora ha estado declarando en el juzgado número 46 de Madrid el doctor Ignacio Villa Elizaga, acusado de participar en el robo de un bebé en 1964 en la clínica O’Donell de Madrid. Según fuentes jurídicas, el doctor ha contestado tanto a preguntas del juez como a preguntas de la acusación para defender su gestión y afirmar que si, tal y como denuncian, el diagnóstico de defunción firmado por él señala que la pequeña murió de otitis, es posible teniendo en cuenta la fecha y también si el bebé era prematuro.

Sobre el sistema de adopciones, que según la acusación fue el eje de la trama de robo de bebés y en el que habría desaparecido Beatriz en 1964, Villa Elizaga habría defendido que todo era legal y que en cualquier caso era algo que dependía de otras personas y de áreas más administrativas de la clínica. Ha reconocido conocer a la monja Sor María Gómez Valbuena de su época en Santa Cristina, aunque asegurando desconocer si se encargaba de las adopciones.

El médico también habría aportado un estudio firmado, entre otros, por él mismo, sobre la posibilidad de muerte por otitis en casos de bebés prematuros. También habría afirmado que en aquella época es posible que la sepsis fuera reflejada en documentos médicos como otitis.

Son explicaciones que “no han convencido” a la acusación, que seguirá solicitando diligencias e intentando que se aporte documentación al procedimiento para demostrar que esta niña efectivamente fue robada: el historial clínico de la madre y de la niña, el certificado de defunción, los exámenes clínicos de ambas y el libro de registro de nacimiento, documentación que según la acusación no ha sido aportada por señalar el archivo regional que “no consta”.

Imputado por tres delitos

Según estas mismas fuentes, por ahora la jueza le mantiene los cargos, imputado por delitos de falsedad documental, detención ilegal y usurpación del estado civil, así como afirman que no ha habido un representante del Ministerio Fiscal en el interrogatorio y que la jueza no ha acordado ningún tipo de medida cautelar. En la puerta del juzgado de Plaza de Castilla esperaba la denunciante Mar Soriano, hermana de la niña supuestamente desaparecida y portavoz de la Plataforma de Afectados por el Robo de Niños: médico y hermana se han cruzado a la entrada y la salida de la declaración.

 
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