'Sin ropa para no vivir sin casa'

Madrid

'Sin ropa para no vivir sin casa'. Es el mensaje central del calendario de estos 13 vecinos del PAU de Carabanchel que se han desnudado ante la cámara de Alberto García Herranz. Son más que fotos. Son historias con nombre propio. Las historias de 12 familias que, o están a punto de perder sus casas, o lo harán cuando se cumplan los diez años en los que acaba su primer contrato con la Empresa Municipal de la Vivienda y el Suelo (EMVS) de Madrid. Viviendas de protección oficial que el Ayuntamiento vendió a un fondo buitre. A pesar de la promesa de que los alquileres se iban a mantener para estos vecinos, no ha sido así y los precios de los pisos se han disparado. Muchos tienen ya pendiente una orden de desahucio y otros saben que a corto o medio plazo estarán en la misma situación.

"El sentimiento de desnudez es me quedo sin, sin piso, sin ilusión, sin nada". La desnudez por fuera y por dentro reflejada en estas 12 instantáneas en blanco y negro por la cámara de Alberto García Herranz. Cada mes es la historia de una de estas familias. Oliver, por ejemplo, es agosto. Tiene la maleta abierta y las llaves en la mano: "esa maleta abierta y esa sensación de la tengo que rellenar ya, ya tengo las llaves en la mano es la manera de transmitir su inquietud ante algo que se puede avecinar de un momento a otro", comenta García Herranz que en este trabajo se ha sentido más psicólogo que fotógrafo. "Montas un trípode, pones las cámara, encuadras, pero en el camino tienes que ir dejando mucho de ti también".

Fotos para las que han posado con un trabajo previo de muchas horas de ensayo, de perder el miedo escénico, y que saben que no van a servir de mucho en su lucha. "Esto realmente es muy probable que no sirva de nada", comenta García Herranz que les dijo a esto vecinos desde un primer momento, "no os va a solucionar un problema ni se va a frenar que se vendan los pisos, pero dentro de unos años las vereis y os sentireis orgullosos de ellas. Es la pequeñita caja negra de un viaje que habeis hecho y que es la lcuha por vuestras viviendas".

El calendario lleva ya a la venta unas semanas. Cuesta diez euros. En un principio han sacado una tirada de 500 ejemplares y lanzarán una nueva edición en caso de que continúen los pedidos. El dinero recaudado será donado a personas en situación de desahucio y en especial necesidad de su barrio, de Carabanchel.