«Forjemos Susana, tú y yo, una nueva alianza de gobiernos socialistas en San Telmo y en La Moncloa». Oferta de alianza de Pedro Sánchez que Susana Díaz ignoró anoche por completo en su discurso. Es el titular que nos dejó el reencuentro tras cinco meses sin verse las caras. El secretario general del PSOE, convencido de la victoria de la candidata socialista, propuso a su «compañera y amiga Susana» «acabar con el daño» que ha hecho el gobierno de Rajoy creando una alianza entre gobiernos socialistas en Sevilla y Madrid, en la Junta y en la Moncloa. A esa oferta «tú en Sevilla y yo en Madrid» no respondió Susana Díaz a su secretario general, dejando la puerta abierta a muchas interpretaciones, aunque la también presidenta de la Junta ha negado reiteradamente en campaña su posible salto a Madrid tras las elecciones. Díaz sólo se refirió escuetamente a Sánchez: «Gracias Pedro». A renglón seguido, cargó con uno de los mensajes más duros de campaña contra el PP y su portavoz Rafael Hernando por afirmar que espera que Susana Díaz no se ponga enferma y acuda al debate del lunes. «No estoy enferma, estoy embarazada, que es la cosa más grande que me ha pasado en la vida. Basta ya de machismo», lamentó. Al margen de los mensajes había expectación sobre cómo recibiría Andalucía a Pedro Sánchez. Está claro que no se trataba de una competición de popularidad, pero si pusiésemos en marcha un pulsómetro a los cánticos, victoria de Susana Díaz interrumpida al grito de «presidenta, presidenta» y «yo con Susana». Ahora bien, Pedro Sánchez, papel digno, también recibió el cariño de los almerienses que le gritaron «presidente, presidente» en un par de ocasiones. La candidata del PSOE celebra hoy sus primeros actos en la provincia de Jaén.