Mercamadrid paga 14 millones para habilitar un área de denominación de origen de la que no hay rastro
La empresa mixta cuyo accionista mayoritario es el ayuntamiento de la capital suscribió un contrato en noviembre de 2013 hasta el año 2032 para levantar un área de productos con denominación de origen en el mayor mercado del mundo del que no hay ni rastro
El dueño del Algarrobico cobrará 14 millones de euros por un contrato blindado de alquiler
Madrid
El contrato de alquiler suscrito en noviembre de 2013 entre Mercamadrid y Mercaocio, empresa vinculada al promotor de El Algarrobico José Domingo Rodríguez Losada, suma 14 millones de euros. Un alquiler hasta el año 2032 para levantar un área de productos de denominación de origen en el mayor mercado del mundo del que no hay ni rastro más de un año después. Los contratos están firmados por la coordinadora de Economía en el Ayuntamiento de Madrid, Dolores Flores, bajo la presidencia en Mercamadrid de Concepción Dancausa. Una de las cláusulas del documento establece que si se resolviera el contrato antes del año 2032 por decisión de Mercamadrid, ésta deberá "indemnizar a Mercaocio con una cantidad equivalente a la renta que quede por cumplir".
Hasta la firma de ese contrato, Mercaocio explotaba las naves y un hotel que había levantado en terrenos de Mercamadrid a cambio de un canon y debía a la empresa mixta 700.000 euros. Con el nuevo contrato, ambas partes ponen fin a los litigios que mantenían por esa deuda.
La Cadena SER se ha puesto en contacto con Concepción Dancausa. Fuentes autorizadas de la delegada del gobierno en Madrid reconocen la existencia de los contratos pero subrayan que las funciones ejecutivas correspondían a Dolores Flores. Esta emisora también ha recabado la versión de Mercamadrid. Aseguran que el objetivo último era que Mercasa se subrogara en el proyecto y asumiera la explotación pero las negociaciones quedaron rotas porque Mercasa condicionaba el mercado de denominaciones de origen a un plazo de alquiler de las naves muy superior. Hasta el año 2055.
Origen de la operación
El contrato suscrito en noviembre de 2013 entre la empresa Mercaocio y Mercamadrid supuso un negocio redondo para el empresario José Domingo Rodríguez Losada, promotor de El Algarrobico. Mercaocio pagaba hasta entonces un canon a la empresa mixta que presidía Concepción Dancausa a cambio de explotar un hotel y unas naves industriales en terrenos de Mercamadrid. Con el nuevo contrato esta situación dio un giro de 180 grados y se puso fin a los litigios judiciales que mantenían por la deuda.
El origen y leitmotiv del arrendamiento se remonta a 2013, cuando Mercasa, participada en un 49% por el Ministerio de Agricultura y al 51% por la SEPI, propuso a Mercamadrid la creación del mercado de denominaciones de origen, coincidiendo con Miguel Arias Cañete en la cartera de Agricultura. Finalmente, Mercasa retiró la propuesta y Mercamadrid asumió el contrato blindado de alquiler hasta 2032, el tope de años permitidos debido al límite de “vida sociedataria” de Mercamadrid.
Tras la propuesta de Mercasa, Mercamadrid decidió llegar a un acuerdo transaccional por el que saldan la deuda de Mercaocio y asumen la explotación de las naves. Una deuda que se genera, según Mercamadrid, porque el ayuntamiento denegó en su día la licencia de restauración que permitría abrir un restaurante en esas naves. Por uno u otro motivo, las naves han permanecido inutilizadas desde hace doce años.
A día de hoy, según fuentes de Mercasa, su intención de habilitar un área de denominación de origen en ese espacio sigue vigente, a la espera de que el ayuntamiento de Madrid resuelva su petición de ampliar el plazo del alquiler.
Negociación con cortocircuito
Tras la retirada de la propuesta de Mercasa, un año después, Pablo González (director de estructuras comerciales) abandonó el consejo de Mercamadrid al que acudía como vocal. Un consejo no remunerado pero clave por su influencia en el Gobierno de Madrid. Según fuentes internas consultadas por la Cadena SER, había llevado las negociaciones, en calidad de enlace entre el ministerio y Mercamadrid, junto al director del departamento de proyectos especiales. Pocas semanas después de la firma de este contrato José Manuel Torrecilla, entonces gerente de Mercamadrid, abandonó la empresa y la directora financiera fue relegada de sus funciones. Lo único que quedó en pie de aquellas reuniones fueron los 50.000 euros netos a Mercaocio, unos 14 millones de euros hasta 2032.
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