La jueza Núñez divide el caso de los ERE en tres piezas separadas

Sevilla

La jueza María Núñez ha dividido el caso de los ERE como ha pedido por tres veces la Fiscalía. Una división a la que siempre se ha opuesto Mercedes Alaya y que puede apartarla ahora del caso, aunque se le haya concedido una comisión de servicio para seguir instruyendo el asunto. La macrocausa se dividirá en más de 200 piezas. Una de ella será la que enjuicie a los políticos que aprobaron el sistema para pagar ayudas sociolaborales y ayudas directas a empresas; otra será la que enjuicie a las personas o entidades que cobraron sobrecomisiones por la tramitación de esas subvenciones y, además, se separarán cada una de las ayudas que se otorgaron.

La jueza Núñez defiende que no se producirá la ruptura de la continencia de la causa y dice que esta separación "contribuirá decisivamente a la agilización del procedimiento y a la simplificación y activación" del caso.

Existen expedientes de concesión de subvenciones y ayudas sociolaborales respecto de los cuales prácticamente no quedan diligencias que acordar, explica la magistrada. "Y en muchas de ellas no se ha avanzado nada, prácticamente desde el inicio de la instrucción, pudiendo ser elevadas a enjuiciamiento de forma inmediata".

Núñez afirma que los "ciudadanos tienen derecho a una justicia ágil, sin dilaciones indebidas, cuando ello es evitable". Y añade que que la sociedad demanda resultados y "siendo posible y viable la agilización del proceso no existe motivo alguno que justifique la dilación en la instrucción".

La nueva magistrada de instrucción 6 de Sevilla cita jurisprudencia del Tribunal Constitucional y del Tribunal Supremo y recuerda que el Supremo y el Tribunal Superior así lo habían sugerido en este caso concreto de los ERE.