Las pymes catalanas apoyan el Derecho a Decidir

Barcelona

Los representantes de la pequeña y mediana empresa de Cataluña toman partido masivamente por el Derecho a Decidir.

Si hace dos días Foment del Treball, la gran patronal, emitía un manifiesto para decir que la gran empresa está inquieta, hoy todas las Cámaras de Comercio y una quincena larga de organizaciones empresariales, han salido en bloque para decir que no tienen miedo:

"A los empresarios, la democracia no nos provoca inquietud, al contrario, nos provoca preocupación la intolerancia y la ignorancia", aseguró Antonio Abad, presidente de la patronal Cecot.

El gran ausente de este contundente acto empresarial a favor del derecho a decidir es precisamente Foment del Treball. Están representadas todas las cámaras de comercio, pero no asiste el presidente del consejo de estos organismos, Miquel Valls, porque -según su entorno- lo ve como un acto electoralista.

Este acto reafirma, a menos de un mes para las elecciones, un manifiesto que ya elaboraron estas asociaciones donde se comprometían con el Derecho a Decidir. Ahora han querido dejar claro que, entre los empresarios, no hay ningún miedo a lo que pase el 27 de septiembre, desmarcándose del documento elaborado por la gran patronal (que fue publicado este martes). El presidente de Pimec, Josep González, también destacaba que, llegados a este momento, es necesario que todo el mundo sea serio y se dejen de hacer planteamientos apocalípticos.

Antes de la exposición de los ponentes, economistas como Jordi Galí, Miquel Puig o Joan B. Casas aseguraron que no habría ninguna sacudida para la economía catalana en caso de declararse la independencia y que los beneficios a largo plazo de salir del Estado serían claros. Uno de los motivos por los que, el presidente de Femcat, Ramon Carbonell dice que hay que respetar lo que expresen los ciudadanos el 27 de septiembre.

La presidenta del parlamento, Núria de Gispert, ha recibido el documento agradeciendo un posicionamiento que considera imprescindible en un momento como este: "Eran necesarios actos donde dejaran de lado las ambigüedades: el sí, pero no o no, pero sí. Estamos en un momento en que, aunque a algunos nos pueda no gustar mucho, es de blanco o negro".

Núria de Gispert y otros ponentes han reconocido que sería mejor haber encontrado un estado que hubiera querido dialogar, pero consideran que no ha dejado ninguna vía alternativa las elecciones del día 27. Durante el acto, eso sí, no se ha sentido ningún grito en favor de la independencia.