Los examinadores de Tráfico reclaman medidas para garantizar su integridad
Piden que los resultados de las pruebas puedan comunicarse posteriormente y en un entorno seguro para evitar conflictos
Córdoba
Hace poco un alumno descontento con el resultado de su examen de tráfico intentó estrangular a su examinador en Granada, pero a veces, no hace falta que medie una agresión física, sino sólo la verbal para que los examinadores de tráfico tengan miedo de comunicar el resultado de las pruebas a los aspirantes.
Y los insultos, desgraciadamente, están a la orden del día. El problema está en que, se encuentren donde se encuentren: en una pista de pruebas, en una zona de prácticas, solos o acompañados; están obligados a comunicar verbalmente el resultado del examen, y eso genera bastantes conflictos, y sobre todo miedo entre los trabajadores.
Por eso piden que los resultados puedan comunicarse posteriormente y en un entorno seguro.
Pero este es sólo uno de los motivos por los que los examinadores de tráfico están en huelga. Desde el 14 de septiembre realizan paros parciales coincidiendo con el cambio de turno para reclamar además menos carga de trabajo diaria, es decir: menos alumnos por examinar al día, y que se evite la privatización del servicio.
Pablo Jiménez , el portavoz de Asextra, la Asociación de Examinadores de Tráfico, pone como ejemplo las recientes agresiones de dos compañeros suyos en Granada y en Las Palmas de Gran Canaria.
“No nos negamos a darle al alumno explicaciones sobre cómo se ha desarrollado la prueba, pero no queremos comunicar el resultado”.
Los examinadores reconocen que pronunciar la palabra apto o no apto, ya les provoca tensión previa, dado que en los últimos años, muchas de esas comunicaciones terminan con “Insultos, portazos e incluso agresiones”, unas agresiones que en opinión del colectivo se pueden evitar si se hace una comunicación posterior.
María Eugenia Vílchez
Me mueven las causas justas. Me gusta contar historias y dar voz a personas que normalmente no la tienen...