El fundador de los Monty Python dirige una ópera en el Liceu
Terry Gilliam, miembro fundador de los Monty Python y director de cine, está en Barcelona para dirigir la ópera "Benvenuto Cellini” en el Gran Teatro del Liceu. Asegura que quiere presentar un espectáculo popular, un auténtico show
Terry Gilliam, fundador de la mítica compañía Monty Python y director de escena de la ópera Benvenuto Cellini / Andreu Dalmau (EFE)
Barcelona
Terry Gilliam, director de la ópera y responsable de la escenografía, dice que ha querido hacer un auténtico show y apunta que al mundo de la ópera le hace falta savia nueva.
Sonriente y travieso, vistiendo una de sus características camisas llamativas, Terry Gilliam explica que, más que una ópera dice quiere presentar un espectáculo popular. Se centra en el escultor Cellini de quien Gilliam dice que lo atrae la necesidad de hacer lo imposible: “soy completamente amateur, tengo poca experiencia en ópera, no sé dónde están los límites ni lo que no se puede hacer. Lo que me encanta ver crecer a la gente. Yo los arrojo desde el acantilado y pueden volar, es extraordinario”
El montaje reúna prácticamente a 100 personas sobre la escenario -9 solistas, 6 niños, 13 acróbatas y 70 coristas "lo que más me gusta en el mundo son los niños y los locos porque sólo ellos son capaces de salir de la realidad en la que vivimos todos y ver la verdadera realidad" .
Gilliam, dice que más que la locura lo que le atrae es la pasión por las ideas y los excesos. Se interesa por títulos de ópera poco conocidos y está contento de que el 40 por ciento de la gente que vio su versión de Fausto, también del compositor Berlioz, nunca hubiera ido antes a la ópera.
El montaje se estrenará el próximo domingo, una sesión que, si no se llega antes a un acuerdo, se puede ver afectada por la huelga convocada por los trabajadores del Gran Teatro del Liceu. Al respecto, Gilliam se limita a cantar “que será, será…”
