El almuerzo, en el pupitre

Alicante

En el colegio Gloria Fuertes de Alicante, ubicado en la zona norte de la ciudad, están organizados para dar una respuesta inmediata a las necesidades básicas que plantean los pequeños que acuden al centro y cuyas familias se encuentran en situación de vulnerabilidad.

Son ya tres años de trabajo intenso de un colectivo de docentes que este curso ya ha creado una comisión de solidaridad en la que están representadas todas las etapas y que se encarga de contactar con entidades para recoger comida, con personas particulares, reparte ropa y proporciona el almuerzo, todos los días, a niños que no lo pueden llevar.

Es una situación que se prolonga en el tiempo. Y es que son muchas todavía las familias que se encuentran sin recursos para cubrir lo más básico. Los maestros del Gloria Fuertes se han implicado al máximo para conseguir que todos los niños acudan contentos al colegio porque ésta es su prioridad.

En este centro de casi 500 alumnos, 328 de los 330 comensales que se quedan al comedor son becados. Hay detectados más de 40 pequeños que no llevan almuerzo ningún día, y los docentes se lo colocan cada mañana en el pupitre antes de comenzar las clases para que no se sientan diferentes.

Lo que hacen es  "un parche", explica Emilio Ruíz, director del centro, y no dejarán de hacerlo, pero "no es la solución" y entiende que la administración debe intervenir y facilitar las ayudas a las familias que se acercan al colegio a pedir ayuda, y que explica, "pasan vergüenza cuando dicen que han conseguido un paquete de leche y piden galletas para el día siguiente". No solo cubren las necesidades más basicas, además han conseguido reducir el absentismo escolar de los pequeños e incluso que sea del 0%.

Juguetes

En este colegio van a impulsar una campaña de intercambio de juguetes, en colaboración con varios colegios de la zona de playas. Pedirán a estos padres que compren un juguete nuevo que puedan abrir los de la zona norte, y a cambio los alumnos del Gloria Fuertes enviarán una manualidad.

El CEIP Gloria Fuertes ahora se están formando, además, para convertirse en una comunidad de aprendizaje para abrir la escuela al barrio y que sea motor del mismo.