Ramos: “Los recuerdos del Athletic los llevo conmigo siempre”

Bilbao

El arquero menos goleado de toda la segunda B (6 tantos encajados en 14 partidos), Alejandro García Torre, que destaca en el líder Barakaldo, y el ex delantero del Athletic Aitor Ramos, ahora referente en el Arenas con sus 6 goles, visitaron Radio Bilbao para recordar que sus ídolos son “Víctor Valdés, sin duda” y “Aduriz” y analizar las trayectorias de dos equipos en la zona noble.

El Barakaldo suma 33 puntos en 14 partidos, sólo un envite perdido, el equipo más en forma de toda la división de bronce que aspira al ascenso: “Los números están muy bien ahora y estamos disfrutando, esperemos que esta racha tan positiva se alargue lo máximo posible”, lanza Alejandro García Torre, su portero asturiano, con pasado en Segunda en Sporting y Recreativo y con dos ascensos a la Liga Adelante en su zurrón con Ponferradina y Racing. Acabó aterrizando en el Barakaldo después de consensuarlo en verano Iñaki Zurimendi, director deportivo fabril, y el entrenador David Movilla: “Se puso en contacto conmigo Zurimendi, en cuatro días nos pusimos de acuerdo. Al míster no le conocía, supongo que tenían una lista de porteros y tengo la suerte de estar aquí, disfrutando muchísimo del fútbol y muy contento”. Hermano gemelo de Jorge García, que juega de central en la Llagostera, y que coincidió con Iñaki Lafuente, que ahora le va a entrenar en el Barakaldo instruyéndole junto a su compañero Jaume Valens: “Hemos entrenado ya con él, me sacó el parecido en cuanto me vio”. Opina de su club que “va pasito a pasito” hacia la profesionalización. A sus 31 años aspira todavía a promocionarse: “La edad buena de los porteros ronda los 30, que coge su poso”. Su ejemplo a seguir es “Víctor Valdés”, sin pestañear. Y el Valencia en Copa en el arranque de diciembre se vive con expectación: “Será una eliminatoria muy dura, pero hay que competirla. No vamos a jugar con el móvil en la mano para hacernos fotos”.

Aitor Ramos, por su parte, debutó ante el Barça en Primera, y encadenó otros cuatro partidos de Liga a las órdenes de Joaquín Caparrós. “Nunca pensé que iba a llegar hasta ahí, son recuerdos que los voy a llevar para siempre”, lanza el punta bermeano. En los campos algunos todavía le llaman “matado, pero da igual, lo llevo conmigo dentro”, narra con humor. Achaca a su salida de Lezama a que “no metí goles” y pasó por Écija, junto a Igor Angulo, Barakaldo, Laudio y ahora suma su cuarta temporada en el Arenas dispuesto a pulverizar su récord anotados, con los seis tantos en su casillero, dos el último partió ante el Toledo: “Después de seis partidos sin ganar nos hacía falta. Empezamos perdiendo, pero pudimos marcar y remontar”. Ha empezado a sacarse el título de entrenador, consciente de que el equipo de Jon Pérez Bolo debe pisar el terreno con sensatez: “Sabemos nuestros objetivos, perdimos por pequeños detalles. La gente se emociona rápido, pero nosotros sabemos lo que tenemos que hacer”. Como referentes mantiene a Aduriz, con el que compartió vestuario y es amante de mediapuntas como “Laudrup, Villa, Figo y Julen Guerrero”.