Sanidad informó de forma desfavorable sobre la planta de Biomasa
“La calidad del aire puede verse afectada durante la fase de construcción y la de funcionamiento”, dice el informe firmado por María Luisa Pita, jefa de servicio de Sanidad Ambiental del Gobierno de Canarias y emitido el 27 de julio.
Las Palmas de Gran Canaria
La consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias emitió el 27 de julio un informe desfavorable sobre la construcción de una planta de biomasa en el muelle de La Esfinge, en el puerto de La Luz y Las Palmas, Gran Canaria. “La calidad del aire puede verse afectada durante la fase de construcción y la de funcionamiento”, dice el informe firmado por María Luisa Pita, jefa de servicio de Sanidad Ambiental del Gobierno de Canarias. Pita también suscribe que la biomasa “emite contaminantes más peligrosos que otros combustibles tradicionales”. Según los cálculos realizados, la chimenea de combustión tendría una altura de 65 metros y en condiciones meteorológicas habituales los valores de contaminación por Dióxido de Nitrógeno estarían “ligeramente por encima del valor del límite anual para la protección de la salud humana”.
Según el citado informe, la instalación prevista “supondría un nuevo foco de emisión industrial en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria y por tanto un incremento en la exposición de los ciudadanos a sus emisiones”. Según las estimaciones realizadas por el propio promotor “el valor límite anual de protección de la salud para Dióxido de Nitrógeno se vería superado en un perímetro de 500 metros y en un radio de tres kilómetros". También produciría un significativo incremento de partículas de hasta diez microcentímetros de tamaño. Estas partículas, según Ecologistas en Acción, están “detrás de numerosas enfermedades respiratorias, problemas cardiovasculares y cánceres de pulmón”. Igualmente, la planta de Biomasa incrementaría el dióxido de azufre. En la conclusión explican desde Sanidad Ambiental que no se han usado los vientos adecuados, los más frecuentes, y que si hubiese sido así “los resultados serían más desfavorables aún”.
El informe remitido por Sanidad Ambiental se hace en respuesta a la solicitud de la Consejería de Industria, Energía y Comercio del Gobierno de Canarias.
Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria, asegura que “este tipo de proyectos han de ser consensuados”. “Esta isla debe apostar por las energías limpias, por las renovables, no puede seguir dependiendo del exterior”, señaló. “Con este proyecto se sigue dependiendo del exterior”, concluyó Antonio Morales, matizando que es una opinión personal, dado que el Cabildo no interfiere en la decisión de la instalación de la planta que ahora mismo está pendiente del informe de impacto ambiental tras pasar el trámite de exposición pública.
La inversión, de unos 100 millones de euros, es considerada por el Gobierno de Canarias como una de las prioridades de la Estrategia de Especialización Inteligente de Canarias 2014-2020, porque la conecta al "crecimiento verde y sostenibilidad: economía baja en carbono, desarrollo industrial y eficiencia energética".
