Los marineros del cerco sólo quieren trabajar para levantar este país

A Coruña

Los marineros y patrones del cerco siguen encerrados en el Ayuntamiento de A Coruña. A la espera de esa reunión entre Xunta y Ministerio que replantee los topes de capturas para la flota de Galicia. Marcos lo explicaba claro ayer en esta casa. Tienes seis hijos y seis manzanas, le das dos a cada hijo. Pero si le das a uno tres, a otro dos y al tercero una no estás haciendo un reparto justo. Los barcos de gran porte a nivel europeo y en la cornisa cantábrica a nivel estatal completan trabajo con el cerco cuando les conviene. Su capacidad pesquera es mucho mayor y, si pueden trabajar sin contención, cuando la sardina o la xarda llega aquí los bancos están muy mermados. Si se aplican además cálculos de capturas históricos para la pesca en los caladeros más importantes de estas especies siempre tienen derecho a más. La flota más respetuosa y que depende más y exclusivamente de la pesca del cerco, la gallega, queda en último lugar también en esta ocasión. Marineros y armadores han decidido dar un golpe en la mesa ante la dejación de la Xunta en la defensa de sus intereses. Llevan años reclamando por las buenas. Al final han plantado un campamento de casi cien días en San Caetano, ahora están encerrados en el Ayuntamiento. Sólo quieren trabajar y seguir sosteniendo este país ¿Hay alguien ahí?