Una fiesta para celebrar que, después de cinco años, vuelven a casa

Murcia

Este viernes se ha formalizado el acto de entrega de llaves del edificio Viña Nueva, uno de los inmuebles que tuvo que ser derribado a consecuencia de los seísmos del año 2011 en el barrio de La Viña, según ha anunciado la concejal de Gestión para la Recuperación, Satur Martínez.

El edificio Viña Nueva cuenta con una superficie de 3.163 m2. El nuevo edificio está formado por 72 viviendas, bajos comerciales y plantas de garaje. Se trata de la zona sur, manzana D-1, entre las calles Herrerías y Jardineros y la Avenida de la Vendimia, en la única unidad de actuación del Plan Parcial de La Viña (URPI-13). Los terrenos se encuentran en suelo urbano.

Los vecinos de este inmueble, entre ellos Rita, que ha hablado de este feliz acontecimiento en la SER, se benefician ahora de una batería de mejoras gracias al Plan Especial de Reforma Interior (PERI) desarrollado en apenas cuatro meses por el Ayuntamiento, cuando el tiempo habitual es de 12.

Éste ha permitido ordenar el espacio edificable en esta manzana y aplicar un cambio de tipología edificatoria a edificación aislada, según fuentes municipiales. Esto ha supuesto la creación de nueva zonas peatonales, dotar de iluminación natural a la planta baja y generar nuevas áreas de planta que favorecerán la dinamización económica y la movilidad.

No se ha incrementado la edificabilidad residencial, sino la edificabilidad en planta baja para usos comunes, uso comercial y social. Pasa a contar con una estructura similar a dos H vistas en altura unidas por una zona común intermedia.

La manzana cuenta con edificios de 7 alturas, planta baja, ático, lo más exentos posibles y con una calidad arquitectónica y estructural fuera de toda duda, suprimiendo las viviendas en planta baja anteriores. Ahora las plantas bajas serán diáfanas porticadas o con locales comerciales y con sótano común para toda la parte de manzana ocupada por el solar.

Este edificio engloba ocho bajos comerciales, 12 cocheras en planta baja, un sótano de 2.000 m2 con 85 plazas de garaje y permite el uso público de 1.358 m2 de espacios libres de propiedad privada.

La edil de Urbanismo ha explicado que la reconstrucción de este bloque de pisos ha sido posible gracias a que el Ayuntamiento aplicó la Ley de Sustitución para beneficiar a los vecinos que sí querían volver a levantar sus viviendas, evitando así la conformación de una minoría de bloqueo que hubiera paralizado el proceso.

Se trata de una herramienta que ha resultado determinante para la reconstrucción de un buen número de edificios, y que en este caso se aplicó a 13 de las 88 viviendas del bloque. Esta actuación se realizó a petición de los propios vecinos.