La orina de lobo ha reducido los accidentes en un 75%

Bilbao

Los datos demuestran que la orina de lobo funciona a la hora de evitar los accidentes causados por atropellos a animales salvajes. La diputación empezó a utilizar este repelente de orina de lobo en 2013 para evitar que animales como corzos o jabalíes cruzasen las carreteras por zonas especialmente sensibles de nuestra red viaria y, desde entonces, la accidentabilidad por este motivo se ha reducido en un 75% en esos tramos donde se ha colocado este producto.

En concreto los datos ofrecidos por el ente foral hacen referencia al tramo del corredor del Kadagua donde se colocaron estos repelentes. un tramo de 30 kilómetros en el que la accidentabilidad por esta causa ha descendido de manera evidente pasando de los 154 accidentes contabilizados en 2012 a 83 en 2013, el año en el que comezó a usarse esta orina de lobo, 72 en 2014 y 38 en 2015. En total 112 accidentes menos en estos 3 años.

De momento la diputación está usando esta orina de lobo en tres tramos de la red viaria de Bizkaia. En concreto en el corredor del Kadagua, el más representativo, un tramo del corredor del Txoriherri y en la variante de Mungia.

La diputación hace traer este repelente natural desde Alaska y lo coloca en botellas situadas junto a los viales a una altura de entre 60-80 cms para que despida olor. La orina es repuesta cada seis meses para que no pierda su efectividad y ahuyente a la fauna silvestre de pasos especialmente sensibles de nuestra red viaria.

Además, el producto se refuerza con atrayentes específicos para especies como el corzo o el jabalí que les atraen hacia pasos sin peligro y se refuerza el cierre de los viales para forzar aún más el paso obligado de los animales por los puntos escogidos.