Urkullu: "La situación se puede demorar"
El Lehendakari, pone como prioritario la reordenación de las vidas de los desalojados porque “se puede alargar en el tiempo”
Irekia
Bilbao
Urkullu junto con la consejera de Seguridad, Estefanía Beltrán de Heredia, y el titular de Políticas Sociales, Ángel Toña, que ya estuvo ayer en Ondarroa, han visitado la zona afectada por el corrimiento de la ladera, en la calle Kamiñalde.
Preocupado porque el desalojo “se puede demorar en el tiempo”, el Lehendakari ha destacado que, aunque no ha habido daños personales por el desprendimiento, “hay daños al orden de vida de las familias afectadas”. Urkullu ha agradecido, asimismo, la “responsabilidad absoluta y exquisitez” con las que se están comportando los afectados, así como la coordinación y colaboración “interinsitucional” entre Ayuntamiento, Mancomunidad de Lea Artibai, Diputación de Bizkaia y Gobierno vasco.
El Lehendakari ha pedido a los vecinos de Ondarroa que disponen de una segunda vivienda vacía, que se acojan al programa Bizigune de Alokabide para facilitarla a los damnificados.
Urkullu también ha explicado que se ha “monitorizado” la ladera del monte, que “continúa cayendo”. Los geólogos e ingenieros trabajan sobre el problema y reciben informes del estado cada cinco minutos, y si sigue sin llover podrán hacer estudios sobre el terreno.
El Lehendakari ha comentado igualmente que se puede tardar unas semanas en decidir cómo retirar los escombros, en analizar los daños y concretas futuras actuaciones para solucionar el problema, ya que ahora “lo prioritario es saber los riesgos”.
