¡Siempre Recre!

Sevilla

Lo reconozco, no me gusta el fútbol, tanto es así, que soy del Betis. Y ser del Betis es algo inexplicable, algo que es y está por encima de todo: del fútbol, del deporte, de los goles, de los resultados y hasta de la inmensidad del Universo. Soy del Betis manque gane, he aprendido a entender la vida a través de las trece barras. Unas veces se gana, otra muchas se pierde, hay rachas para llorar de alegría y la mayoría de ocasiones el llanto al bético le viene porque toca llorar precisamente de beticismo. Pero ser del Betis, sobre todo te enseña a no fallar nunca. El que no es del Betis es porque no puede; y esta teoría me la confirman mis amigos los sevillistas, que aunque se enfadan conmigo cuando la formulo, son los primeros que me juran que no podrían ser del Betis en la vida. ¿Lo ves? Po no te lo acabo de decir.

Y es que algunas cosas se eligen y otras sencilla y mágicamente se son. La gente cambia de trabajo, de aficiones, hasta de amor de su vida, la gente se casa y se “separta” tres o cuatro veces y se juran amor eterno, ¿otra vé?...otra ve, la gente se busca un nuevo mejor amigo cada cinco o seis años, depende de si te da por la pesca o las bicicletas, la gente cambia sin vergüenza ninguna hasta de partido político, la gente cambia de ideales, de ideas, de opinión y hasta de Dios, que no será el primero ni último que bautizado cristiano acaba budista, pasa por ateo y muere convertido al islam mismo. La gente cambia de nacionalidad y se borra de un país como el que se borra de zumba. La gente cambia hasta de colonia, pero de lo único que no he conocido el caso, es de aquella persona que alguna vez, aunque fuese solo una, cambiase de equipo de fútbol. Y esto, queridos y queridas estoy seguro de que quiere decir algo.

Hay cosas que se eligen y otras que sencilla y mágicamente se son…y yo soy del Betis y andaluz. Y entiendo que justo ahora deberíamos estar todos como balas de cañón, apoyando, honrando, luchando y peleando por él, por ese equipo al que tanto le debemos, por esos colores que tanto representan, por esa gente que con orgullo pueden decir que solo ellos tienen el Título que jamás ningún otro equipo podrá nunca conseguir. Va por ti Decano, va por ti Recre, va por el Huelva. Y por ellos llego el momento de ser lo que se quiera ser, pero siendo también del Recre.

Por aquel lunes 23 de diciembre de 1989, por aquel salón de chimeneas del antiguo Hotel Colón, donde se firmó el acta de fundación del Huelva Recreation Club, por el Dr. William Alexander Mackay, por los mineros de Río Tinto, por aquel Velódromo que inaugurase la Reina María Cristina me quiere gobernar con Alfonso XIII de la manita, por el Antiguo Colombino, y por el Nuevo, por Víctor Espárrago y por Poli Rincón, por aquella final contra el Mallorca, por aquel centenario amargo y para que se note que hoy soy más sincero que nunca…hasta por Joaquín Caparrós, por vosotros hermanos onubenses, por ti Recre, por ti Decano, por Huelva. Porque esto no es cuestión de fútbol, es cuestión de orgullo, de sentimientos, de verdad, de no ver como una vez más tenemos que ahogar el fracaso de los de arriba con las lágrimas de los de abajo. Porque Huelva, es Rosa de los Vientos De la mejor afición Decana de un sentimiento, que llevamos dentro en el corazón, porque Huelva en el mundo es bandera entre el Tinto y el Odiel, Y en el fútbol es la primera, por ser pionera del Deporte Rey, y sobre todo porque cuando mi Recre juega por fandangos, no hay en este mundo un equipo mejor Mi Recre dice cantando no hay en este campo mejor afición.

Porque ojalá sea solo una pesadilla la cantinela de que estamos ante el posible último partido de aquellos que jugaron el primero. Porque no vamos a permitir la desaparición del Recre, porque el ayuntamiento nunca debió vender aquel 75%, porque los empresarios que se acercan al fútbol por fin entiendan que esto no es un negocio si no algo mucho más maravilloso, que lejos debe estar de tratarse como una empresa más, porque esa empresa no juega a la pelota, si no que juega con la ilusión de todo un pueblo, que tiene sus colores, su himno, su batallón y sus ganas puestas en un escudo, en un equipo, en su equipo, en el Recre. Porque como andaluz, como estrenado choquero y como bético de toda la vida le digo a todos aquellos que vienen a enriquecerse con los colores de mucha gente… que VIVAN EL FÚTBOL MANQUE PIERDAN, y si no le entienden así, que nos hagan un favor y se queden fuera de juego.

Fdo: Uno al que no le gusta el fútbol, pero que sobre todas las cosas es del Betis, andaluz y a partir de ahora y para Siempre… del Recre. ¡Vamos, Recre! Es mi vida blanquiazul en la bandera. Huelva siente cómo ruge tu grandeza. Tu leyenda será siempre la primera. ¡Siempre Recre! Es mi Huelva para el fútbol, una copla que se baña.