Ninguna de las hermandades que decidieron salir completan el recorrido ante la incesante lluvia
El Huerto tomó la decisión de salir y tras refugiarse en el IES Góngora, decidió volver a su templo ya que la lluvia hizo presencia a su llegada a Tendillas
Córdoba
Domingo de Ramos pasado por agua. La Borriquita se ha tenido que refugiar en el Instituto Góngora después de que una gran tormenta de agua y granizo alcanzara al cortejo procesional en la calle Jesús y María.
Ha sido una fuerte tormenta de veinte minutos que ha dejado pasado por agua la mañana del Domingo de Ramos. La ciudad esperaba con ganas que La Borriquita saliera a la calle, ya que es la primera de las hermandades en realizar Estación de Penitencia.
La mañana comenzaba soleada y la previsión de agua era para más tarde, motivo por el que desde la Hermanad de Nuestro Padre Jesús de los Reyes decidió salir a completar el recorrido procesional.
Alrededor de las doce la mañana una nube negra nublaba las calles de la ciudad y sin previo aviso comenzó a descargar un intenso mato de agua y granizo que obligo a la precesión a refugiarse en el IES Góngora hasta que amainara el agua.
Sin duda una gran desolación entre penitentes, hermanos y costaleros, que ya no solo ven frustradas sus ganas de realizar su estación de penitencia, ahora hay que valorar posibles daños en la imágenes tanto del Misterio como en el Palio.
Hasta que las condiciones meteorológicas no sean favorables, La Borriquita permanecerá en el IES Góngora.
Por la tarde, la primera que hacía estación de penitencia era la Hermandad de El Amor, que desafiando a las nubes decidió salir a la calle ante el fervor de los devotos. La meteorología continuaba incierta, salía el sol, pero las nubes lo tapaban rápido. Pese a ello, El Amor salió para realizar su recorrido pero a tuvo que volver a su templo ante la incesante lluvia.
La Esperanza, El Rescatado y Las Penas esperaron hasta última hora, ya que el parte meteorológico daba una tregua con la entrada de la tarde, pero al ver que la lluvia no cejaba, desistieron y decidieron no poder en peligro el patrimonio de la Hermandad, se quedaron en casa.
El Huerto puso a sus titulales en la calle. Pese a la amenaza de lluvia, la hermnadad salió a recorrer las calles de la ciudad. Cuando se disponía a entrar en Tendillas, una tromba de agua le obligó a refugiarse en el IES Góngora y tras cesar la lluvia, de vuelta a su Templo.
De esta manera finalizó un Domingo de Ramos con un denominador común, la lluvia. Los cofrades siguen mirando al cielo de cara al Lunes Santo.