La Custodia que brilla más que el sol

Toledo

7 meses de intensos trabajos de restauración han conseguido que una de las obras más importantes de la orfebrería religiosa vuelva a deslumbrar. La Custodia está lista para salir a las calles del Casco Histórico este jueves con su color y brillo originales. Un trabajo conjunto del Instituto de Patrimonio Cultural y Talleres de Arte Granda apoyados en estudios históricos y empresas especializadas como laboratorios y gemología.

La restauración se inició el 16 de octubre de 2015 con el traslado de ambas piezas al taller de la Catedral. Para desmontarlas se han seguido las instrucciones que dejara el platero Vicente Salinas a finales del siglo XVI. Los trabajos los ha dirigido Paz Navarro y han sido realizados por la empresa Talleres de Arte Granda. 

 El deán de la Catedral, Juan Sánchez, ha explicado que se han limpiado todos los elementos de manera mecánica y química, eliminando la sulfuración de la plata. Se ha consolidado el interior de madera y los elementos metálicos. Las piezas fracturadas se han soldado con láser.

Paralelamente dos historiadoras han trabajado sobre la Custodia catalogando y estudiando todas las piezas. Además se ha hecho un estudio gemológico sobre las piedras preciosas y estudios físicos que han permitido conocer su estructura interna. Según Carmen Pérez de Andrés, subsecretaria general del Instituto de Patrimonio Cultural Español, dichos estudios han permitido, por ejemplo, conocer la procedencia de muchas de esas gemas. 

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UNA JOYA QUE NO DEJA INDIFERENTE A NADIE 

La parte interior portatil es la custodia que perteneció a la Reina Isabel la Católica. Es de oro esmaltado con piedras preciosas. La construyó en torno a 1495 un platero de origen catalán llamado Jaume Aimeric. Mide 98 centímetros y pesa casi 17 kilos. 20 años después, el cabildo toledano encargo a otro platero, el aleman Enrique de Arfe, la ejecución de una mayor, donde va la pequeña, ésta de 3 metros de altura y 370 kilos. Ambas son de estilo gótico flamígero. El Arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, ha recordado que es para los fieles católicos símbolo de la Eucaristía y la presencia de Jesucristo. 

Solemne y popular. Así la ha calificado el presidente de Castilla La Mancha, Emiliano García Page, afirmando que como expresión artística y en el corazón no deja a nadie indiferente, que es un símbolo intergeneracional que, una vez se echa a la calle, entra en comunión con el pueblo. 

La alcaldesa de la ciudad, Milagros Tolón, ha agradecido el trabajo realizado para restaurar una de las joyas religiosas más importantes del mundo. Algo que va a permitir que cinco siglos después podamos contemplarla igual que los orfebres que la ejecutaron.