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Qué duda cabe, por Víctor Grande

El teflón me resbala

Qué duda cabe, por Víctor Grande

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03:05

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A Coruña

Este texto lo he escrito con nueve dedos nada más, porque el índice de la mano derecha me lo he quemado friendo un huevo y ahora tiene una venda. Tampoco quiero que esto sea un espacio en el que yo les cuente mis desgracias, nada más lejos de mi intención. Pero lo cierto es que de todo se puede sacar jugo y, mientras el aceite saltaba de la sartén a mi dedo, mis ojos se llenaban de lágrimas y me disponía a gritar una serie de improperios que jamás reproduciría en esta sección, pensé: ¿Porqué no hay más cosas hechas de teflón como las sartenes?

El teflón, cuyo nombre científico es politetrafluoretileno y esto lo digo para dármelas de listo, pero lo he leído en la wikipedia, es eso que hace que las sartenes sean antiadherentes, o sea, que les resbala todo y por eso son fáciles de limpiar. Tu le preguntas a una sartén: ¿Oye sartén, te puedo limpiar? Y ella, como tiene teflón y todo le resbala, dice: Pse, por mi vale.

Debería haber más cosas con teflón. Por ejemplo, los mandilones de los niños en el cole. Si es que llevan cinco minutos en la guardería y ya están llenos de porquería. Si los hicieran de teflón, toda esa porquería se iría al suelo y así en casa no habría que poner tantas lavadoras.

Claro que si el suelo también llevase teflón, la porquería se escurriría sola hacia fuera de los edificios y el ahorro en limpieza sería enorme. Claro que si el suelo de las calles fuese de teflón, la porquería se escurriría hasta los sumideros. Y si los sumideros fuesen de teflón...en fin, que ya se pueden imaginar la secuencia.

Pero hay muchas más aplicaciones para el teflón que todavía no se han explotado. En deportes, por ejemplo. Imagínense, los guantes de boxeo de teflón. Este deporte ganaría muchísimo viendo como los guantazos resbalan en la cara del contrincante haciendo tropezar al que golpea. O en fútbol, un balón de teflón, que se le pudiera escapar al portero de las manos. El teflón dotaría sin duda de más aleatoriedad al deporte y desde luego, sería una mina de oro para los videos de humor en youtube.

Da la impresión de que incluso nosotros mismos estamos hechos de teflón, que nos resbala todo, porque a diario nos sentamos en el sofá de casa a ver las noticias y vemos a los refugiados, a los corruptos y a los imputados y luego, a otra cosa mariposa.

Pero, queridos amigos, el teflón tiende a degradarse y poco a poco a las sartenes se les empiezan a incrustar cosas que acabarán un día por echarlas a perder. Mi consejo es que si pueden, se quiten la capa de teflón de encima y salgan a la calle a ver si está cociendo algo. Qué duda cabe.

 
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