El derrumbe del edificio de Los Cristianos se produjo por una acumulación de fatalidades

Santa Cruz de Tenerife

El ingeniero encargado de realizar la investigación forense en el edificio colapsado en Los Cristianos (Tenerife), Óscar Herrera, ha aseverado en la SER que el derrumbe no responde ni a las obras realizadas ni a la antigüedad del inmueble, sino a un conjunto de fatalidades que determinaron que el edificio de nueve plantas se viniera abajo, acabando con la vida de siete personas y dejando a tres heridos el pasado 14 de abril. "Los siniestros habitualmente ocurren por diversos factores. La fase de investigación ha consistido en el examen de los restos, toma de muestras y conclusiones. Estamos en una fase muy inicial del estudio y nos resulta todavía imposible dar una respuesta que sea fiable", explicó Herrera.

Por otra parte, y a pesar de la cautela recomendada en una investigación de estas características, Herrera sí descartó por completo la hipótesis de una explosión. “Cuando estuve revisando las instalaciones en el lugar del siniestro no observé ningún indicio de explosión sí se mencionó por parte de algunos vecinos y testigos el fuerte olor a gas que es algo normal tras el colapso del edificio".

Los trabajos de derribo de la parte de la estructura que continúa en pie comenzarán el próximo lunes, tienen un plazo de duración de 15 días naturales y obligarán al desalojo preventivo de 33 viviendas y locales comerciales de 4 edificios, en gran medida porque los accesos a los domicilios quedarán bloqueados durante los trabajos. Además, solo 4 residencias y un local comercial del edificio Linares deberán ser desalojadas al encontrarse en zona de riesgo, definida como tal no por factores estructurales, sino por el adosamiento de linderos y el peligro de desprendimiento de cascotes.