El Consell busca una administración más ágil y menos burocrática

Valencia

Del cónclave de Torrevieja saldrá una administración menos burocratizada y más ágil. Esos son los objetivos que se marca el Consell, reunido durante el fin de semana en la localidad alicantina para establecer las líneas de actuación del gobierno de cara a los próximos meses.

El president Ximo Puig ha avanzado algunas de las conclusiones de la reunión, donde se ha hablado, entre otros asuntos, de los Presupuestos del año próximo.  El jefe del Consell ha dibujado dos pilares fundamentales de las cuentas que organizarán la actividad del gobierno durante 2017: el refuerzo de los servicios públicos y el apoyo al empleo de calidad.

Además, el Consell no prevé olvidarse del problema de la infrafinanciación que azota todas las cuentas de la Generalitat. Puig ha insistido en que no se conforman con "esto es lo que hay" y ha prometido que no van a permitir que los valencianos sigan "perdiendo derechos y recursos", con respecto al resto de españoles y por culpa del Gobierno Central. De hecho, Puig ha avanzado que no piensan renunciar a la "deuda histórica" del Gobierno con la Generalitat, una deuda que el President ha cifrado en  6.900 millones entre 2009 y 2014.

"Gobernar mejor"

Por su parte, la vicepresidenta del Consell Mónica Oltra ha avanzado dos compromisos que salen de Torrevieja: la modificación de la Ley de la Función Pública y de la ley 1/2015 de hacienda - que Oltra ha calificado como la ley de "para lo que me queda en el convento..."-. Ambas normas, aprobadas por el PP, han dado como resultado una "administración raquítica" y dominada por unos niveles de burocracia "insoportables" que dificultan, en palabras de Oltra, la atención a los ciudadanos.

El objetivo del Consell es, según la Vicepresidenta, "gobernar mejor" gracias a una administración que "dé respuestas" a los valencianos. En esta línea, no sólo se buscará reducir la maraña burocrática, también favorecer la implantación de nuevas tecnologías. Según Oltra, la valenciana es una administración del siglo XX donde la tecnología sólo está integrada a un 15%, cuando la media española está en el 86%. 

La vicepresidenta ha remarcado que la implantación de nuevas tecnologías favorecerá la atención y facilitará la vida de las personas que es, en palabras de Oltra, "por lo que estamos aquí".