El Ayuntamiento de Pamplona exhumará los restos de Mola y Sanjurjo
En noviembre se comenzarán los trabajos para las exhumaciones y el cierre de la cripta del Monumento a los Caídos donde descansan los cuerpos de ambos líderes golpistas y de otras 6 personas
Pamplona
El Ayuntamiento de Pamplona ha activado el proceso para la exhumación, el próximo 16 de noviembre, de todos los restos mortales enterrados en la cripta del Monumento a los Caídos, incluidos los de Emilio Mola y José Sanjurjo, dos de los generales que protagonizaron el golpe militar de 1936.
"No hay aquí ningún atisbo de revanchismo, ni de favorecer a unos o a otros, sino más bien de cumplir la legalidad vigente y de hacer justicia con una parte de nuestra historia", ha precisado en rueda de prensa el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, al anunciar la puesta en marcha del proceso, junto con el médico forense Paco Etxeberría.
Etxeberría, profesor de la Universidad del País Vasco y presidente de la Sociedad de Ciencias Aranzadi, será el encargado de dicho proceso, que se hace para cumplir la ley de Memoria Histórica aprobada por el Parlamento de Navarra en 2013.
Además de los mausoleos de ambos mandos militares, en la cripta se encuentran enterradas otras seis personas, todas ellas del denominado Bando Nacional, caídas en el frente durante los más de tres años que duró el conflicto armado.
Tras los trabajos de exhumación, comprobación y documentación de los restos mortales contenidos en la cripta del Monumento a los Caídos, estos serán entregados a los familiares una vez que se clausure la cripta como espacio de cementerio.
"La tarea la vemos casi sencilla", ha señalado el forense Pacto Etxeberría, cuyo equipo ha recuperado estos años alrededor de 8.000 esqueletos de más de 400 fosas comunes, dos de ellas pertenecientes a personas "del lado de quienes ganaron la guerra".
Según ha explicado el alcalde, "desde hace ya meses el Ayuntamiento ha venido haciendo las gestiones oportunas con la máxima discreción y respeto para llevar a cabo esta acción, con la que pretendemos cumplir la Ley de la Memoria Histórica y por supuesto, dar respuesta a una reivindicación social que viene de lejos en nuestra ciudad".
"No entendemos cómo este proceso no se ha iniciado antes", ha agregado el alcalde, quien ha destacado la "buena disposición y ambiente de colaboración" entre el Ayuntamiento y el Arzobispado, que donó en 1998 al Consistorio el Monumento para su renovación pero mantuvo su uso religioso.
Asiron ha valorado también la relación establecida con las familias afectadas y, al respecto, sin ofrecer detalles concretos por la "confidencialidad y máxima discreción" exigidas, ha precisado que "en general" la disposición de las familias ha sido "buena", aunque "alguna" ha manifestado "reticencias". "El sentir mayoritario es proclive a la exhumación", ha dicho.
El alcalde ha comprometido "profesionalidad, seriedad y respeto" en este proceso, que se iniciará formalmente mañana con la solicitud al Departamento de Salud del Gobierno de Navarra de la clausura de ese cementerio.
Una vez se obtenga la autorización, el Ayuntamiento dará a conocer al público la recogida de los restos con una antelación mínima de dos meses, a fin de que las familias puedan adoptar las medidas que estimen oportunas como, por ejemplo, la entrega de los restos mortales o de las cenizas en caso de cremación.
Junto a los restos de los generales Emilio Mola y José Sanjurjo, que fueron trasladados a esa cripta en 1961 tras fallecer el 23 de junio de 1937 y el 20 de julio de 1936, respectivamente, en los otros seis sepulcros se encuentran fallecidos de cada una de las merindades navarras, así como el muerto más joven y el de mayor edad durante la Guerra Civil.
Las tumbas corresponden en concreto a Joaquín Sota Garayoa (Tafalla. Merindad de Olite) que murió a los 15 años; Severiano Arregui (Puente la Reina. Merindad de Pamplona), que falleció a los 62 años; Pedro Martínez Chasco (Oteiza de la Solana. Merindad de Estella); Jaime Munárriz Escondrillas (Cascante. Merindad de Tudela), primer fallecido el día del Alzamiento; y a los hermanos Joaquín y Dimas Aznar Zozaya (Javier. Merindad de Sangüesa).