La expareja de Juana Ramos podría haberla tirado al mar
Una vez levantado el secreto de sumario del caso de Juana Ramos, la mujer desaparecida en Gran Canaria desde el pasado 20 de agosto, se conocen más detalles de la investigación.
Las Palmas de Gran Canaria
La versión del sospechoso, la expareja de Juana Ramos, y los datos de la Policía no coinciden.
Ayer la jueza reconstruía junto al detenido el trayecto que realizó con la desaparecida antes de desaparecer el pasado 20 de agosto. Las fotos junto a un restaurante del norte de Gran Canaria y la última localización del móvil en la zona del Guincho desmontan el relato del sospechoso. Samuel Falcón, sobrino y portavoz de la familia, sostiene que el detenido ha ofrecido dos versiones de lo sucedido. La primera "la de Las Torres" y ya tras su detención "dijo que había sido en el Barranco de Moya y tras levantarse el secreto de sumario se ve que tanto una como otra son mentira", afirma.
Para la familia los datos están claros. Miguel Ramos acabó con la vida de su expareja y la arrojó al mar. Solo esperan que confiese para poder descansar. "Puede haber ocurrido una discusión o un golpe involuntario. Pero que lo diga y deje descansar a la familia".
La magistrada ha pedido informes sobre las corrientes marinas de la zona y ayuda a los buzos para encontrar a la desaparecida.