El radar de Saltacaballo reduce a la mitad el número de accidentes en este tramo
En apenas seis meses ha disminuido un 86 por ciento la cifra de heridos
Santander
Las medidas puestas en marcha por la Jefatura Provincial de Tráfico en la Autovía A8, a la altura de Saltacaballo, han dado sus frutos al reducirse el número de accidentes.
Seis meses después de la entrada en vigor del nuevo radar en dirección a Bilbao, la cifra de accidentes se ha reducido a la mitad y la gravedad de los mismos también ha bajado de forma significativa, con un 86 por ciento menos de heridos. Todo ello en un contexto en el que la intensidad de la circulación ha crecido un 5 por ciento.
El alto número de accidentes que concentraba esa zona de la Autovía del Cantábrico obligó a actuar a la DGT que aplicó primero limitaciones de velocidad a 80 kilómetros por hora, mejoró el firme para que tuviese mayor adherencia, hizo obras en las cunetas y luego instaló el radar.
Según el jefe de tráfico en Cantabria, José Miguel Tolosa, todas esas medidas, junto a la concienciación de los conductores está dando sus frutos con una importante reducción de la siniestralidad.
Además, ha explicado que la DGT ha instalado una de las tres cámaras de control automatizado del cinturón de seguridad en esta misma zona