El Nobel de Química fue acogido con vítores y aplausos en la UMH donde se siguió en directo por YouTube

Para los que nos dedicamos a las ciencias sociales, los de letras, es todo un descubrimiento comprobar cómo se emocionan los de ciencias,  los científicos. Sabemos que es un trabajo muy vocacional, que están poco y mal pagados y que, sin embargo, de sus descubrimientos y de su labor derivan avances importantísimos para el ser humano. Por eso es llamativo verlos emocionarse, jalear y vitorear a sus compañeros de profesión al ser reconocidos por un premio, nada más y nada menos que el Nobel, eso sí.

Ayer el grupo de investigación de la Universidad Miguel Hernández, (UMH), que lidera la catedrática Ángela Sastre, ilicitana de adopción, hizo una parada en su trabajo cotidiano y se reunieron todos delante de un ordenador para seguir por youtube el anuncio del Nobel de Química. Cuando se dió el nombre de Sauvage, Stoddart y Feringa rompieron en aplausos y jalearon un "premio merecidísimo". Lo cuenta emocionada la investigadora que explica que el trabajo en material molecular y nanotecnología que comparte con los Nobel, es muy gratificante. "Creamos moléculas de la nada con unas propiedades que pueden ser farmacológicas, optoelectrónicas, para obtener energia o como fármacos por ejemplo contra el cáncer". "Sois Dios", le bromea esta periodista. Ángela se rie y dice que lo intentan. La nanotecnología trabaja sobre la millonésima parte de un milímetro.

Los nuevos Nobel son un referente para los científicos españoles, para los químicos en concreto, ya que muchos de ellos incluso se han formado con estos tres científicos capaces de diseñar moléculas que actúan dirigidas como máquinas. La química y la nanotecnología estan de enhorabuena y así se vivió ayer en un laboratorio de la UMH.

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