El entorno de Sevilla-Canalejas se mueve

Madrid

Luz verde para la futura movilidad en el entorno Sevilla-Canalejas. Antes de que el Grupo Villar Mir concluya la rehabilitación de los edificios adquiridos al Santander para albergar un hotel Four Seasons, viviendas de lujo y una galería comercial, el Ayuntamiento se anticipa a los posibles problemas de movilidad que puedan surgir en esa zona, junto a la Puerta del Sol.

La idea del Gobierno municipal es “mejorar la estructura viaria, aumentar los espacios peatonales, remodelar los aparcamientos subterráneos para adaptarlos a la normativa de seguridad vigente y reubicar parte de las paradas de autobuses que actualmente se encuentran en la calle Sevilla”.

Estos son algunos de los objetivos del Área de Desarrollo Urbano Sostenible (DUS), que dirige José Manuel Calvo, con la modificación del Plan Especial de ordenación para la infraestructura subterránea destinada al transporte Sevilla-Canalejas y aparcamientos, que la Junta de Gobierno tiene previsto aprobar este jueves.

El origen del documento se sitúa en 2014, cuando se aprobó una modificación del Plan General para dar viabilidad a la rehabilitación del conjunto de Canalejas y se definían las bases para la implantación de una infraestructura de transporte en el subsuelo ampliado bajo los edificios. Ese mismo año se aprobó un Plan Especial para la implantación de esa infraestructura, pensada principalmente a albergar dársenas para autobuses urbanos públicos.

Cambios en la infraestructura subterránea

Sin embargo, “una reflexión iniciada por un informe del propio Consorcio de Transportes ha concluido que el soterramiento de las dársenas de autobús no representa necesariamente una ventaja para el viajero sino que, al contrario, podría suponer una dificultad añadida, al obligar a un desplazamiento vertical que tendría un efecto disuasorio sobre un amplio colectivo de usuarios.

La modificación del Plan Especial, permitirá la implantación de ese nuevo contenido de la infraestructura, que podrá albergar “una plataforma logística de ruptura de cargas, estacionamiento de taxis, coches eléctricos de alquiler, bicicletas, vehículos de servicios públicos, etc.”

Mejora del espacio público

El documento mantiene el objetivo de mejorar el espacio público, preservando la presencia del transporte público en superficie. Para ello, “se reorganizarán las líneas y paradas de autobuses, distribuyéndolas en el entorno, para evitar la actual concentración de las mismas en la calle Sevilla”. Esta modificación, según el Ayuntamiento, ha sido estudiada por las Comisiones de Patrimonio “que han valorado favorablemente su menor impacto paisajístico en un entorno tan valioso”.

Aparcamiento

También se prevé la remodelación integral del aparcamiento público construido en 1965, "para adaptarlo a las exigencias actuales de accesibilidad y seguridad".

Tramitación

Tras la aprobación inicial, el expediente será sometido a un periodo de información pública de un mes, tras el cual se corregirá con las alegaciones que resulten estimadas y se aprobará definitivamente. En paralelo, se resolverá la concesión actual del aparcamiento público, para que el nuevo concesionario asuma la obra pública, consistente en la reforma del aparcamiento, así como las de la infraestructura subterránea y la urbanización superficial de la vía pública. Se prevé que la nueva infraestructura esté en funcionamiento en dos años.

La zona afectada

El ámbito afectado por el documento urbanístico suma una superficie sobre rasante de 25.440 m2 situados entre las calles de Alcalá entre los números 6 y 36, Sevilla, Cedaceros, Arbalán y Virgen de los Peligros, la Plaza de Canalejas, y la Carrera de San Jerónimo, entre Puerta del Sol y calle Cedaceros. A esta superficie hay que sumar 905 m2 situados bajo los edificios de la calle Sevilla nº 1, 3 y 5 calificados como dotacional para el transporte.

La operación

Villar Mir (OHL) compró en diciembre de 2012 los siete edificios ubicados en el número 1 de la plaza de Canalejas, el número 7 de la Carrera de San Jerónimo, y los números 6, 8, 10, 12 y 14 de la calle de Alcalá. Pagó 215 millones al Banco Santander. En julio de 2014 inició la construcción de un centro comercial de 15.000 metros cuadrados, un hotel de cinco estrellas (Four Seasons) y pisos de lujo.