Reclaman un pacto de Estado para educar y prevenir la violencia de género

Palma de Mallorca

UGT reclama al Gobierno un gran pacto de Estado contra la violencia de género que recoja medidas para educar en la prevención, licencias con sueldo para las víctimas y protocolos contra el acoso en las empresas. Con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia de Género que se celebra el próximo viernes 25 de noviembre, el sindicato ha recordado que Baleares lidera este año el número de mujeres asesinadas por la violencia machista.

En lo que llevamos de año, el número de denuncias por violencia de género a nivel nacional se ha disparado un doce por ciento hasta superar las 33-mil en todo el país. En las islas, la ratio de víctimas por cada 10.000 mujeres se sitúa en un 19,5 por ciento, por encima de la media nacional del 13,5. Según los datos referidos a 2014, Baleares registró ese año un total de 2.026 denuncias, un 3,7 por ciento del total de las presentadas a nivel nacional.

Unas cifras nada esperanzadoras para Xisca Garí, secretaria de Mujer e Igualdad del sindicato, que además llama la atención sobre las manifestaciones que la violencia de género tiene en el ámbito laboral y que se traduce en el acoso sexual. Un tipo de agresiones que se han disparado durante la crisis, sobre todo en el sector servicios.

Desde UGT exigen al Gobierno central un gran pacto de estado contra la violencia de género en el que se fomente la tolerancia cero contra este tipo de agresiones. Garí propone licencias con sueldo de no menos de dos meses para las víctimas, así como la erradicación de los perjuicios laborales para las afectadas ocasionado por las ausencias y las bajas médicas.

El sindicato también pide garantías de empleo, ya que entre 2003 y 2014 apenas se cerraron 60 contratos bonificados para víctimas en las islas. Una herramienta que dice Garí, está resultando claramente ineficaz. Reclama también la obligación de implementar en las empresas medidas de prevención y protocolos contra el acoso sexual y el reconocimiento de los derechos de estas víctimas equiparándolos a los que tienen las afectadas por la violencia de género.