La Audiencia condena a dos menores por humillar a una compañera por Whatsapp

Alicante

La Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a dos menores a pagar una indemnización de 2.800 euros a una compañera de clase por humillarla en un grupo de Whatsapp con mensajes sexuales vejatorios y ofensivos.

Como consecuencia de los hechos, que tuvieron lugar en 2014, la víctima, también menor, sufrió un trastorno por estrés postraumático durante cuatro meses.

Un perfil que se ajusta al que traza ANAR, la Fundación de Ayuda a Niños y Adolescentes en Riegos, que alerta sobre un incremento de hasta en un 75 % del acoso escolar entre 2014 y 2015.

En el caso de esta sentencia, los dos acusados escribieron en el grupo del que formaban parte otros compañeros de clase, mensajes contra la víctima sin el consentimiento de la menor aludida y con insinuaciones y referencias de contenido sexual, varios con carácter vejatorio y humillante. Aunque la niña se dio de baja del grupo, a las pocas horas la volvieron a agregar y se reprodujeron las frases de contenido vejatorio.

Desde ANAR advierten de que uno de cada cuatro casos de acoso escolar ya se lleva a cabo haciendo uso de las nuevas tecnologías. De hecho, el 80 % se produce vía Whatsapp y el 90,6 % dentro del propio recinto escolar. La situación se mantiene una media de nueve meses hasta que la víctima se atreve a denunciarlo. Y en la mayoría de los casos -uno de cada siete-, esta víctima es una chica, según apunta Diana Díaz, subdirectora de la Fundación.

De hecho, el perfil de esta víctima de ciberacoso se corresponde al de una niña de 13,6 años, española, buena estudiante y de familia tradicional. En el 90 % de los casos sufre consecuencias psicológicas.

Desde la Fundación creen que aunque los docentes y la comunidad educativa está poniendo en marcha importantes medidas para atajar el problema, hay que analizar el origen de tanta agresividad, dado que ésta ha aumentado seriamente en todo tipo de violencias, entre los menores.

En la Comunitat Valenciana, el 7,8% de las llamadas de menores recibidas el año pasado eran por esta razón, y por ciberacoso en concreto, un 7,5 %.