El PP de Extremadura sigue estudiando los casos de Morales y Pozo
El diputado autonómico, Juan Antonio Morales, y el alcalde de Guadiana del Caudillo (Badajoz), Antonio Pozo, asistieron a un acto en el que fueron premiados por la Fundación Francisco Franco. El PSOE vuelve a pedir su cese una semana después y tira de ironía: "No nos extrañaría un mensaje de Monago a Morales para decirle sé fuerte"
Badajoz
Una semana después de que saltara la polémica, el PP de Extremadura sigue sin tomar una decisión en torno a la presencia de dos de sus cargos públicos en un acto organizado por la Fundación Francisco Franco.
El diputado autonómico, Juan Antonio Morales, y el alcalde de Guadiana del Caudillo (Badajoz), Antonio Pozo, acudieron a una cena celebrada en Madrid, el pasado día 2 de diciembre. Allí fueron premiados "por su oposición a la Ley de Memoria Histórica".
Este lunes, los populares han vuelto a remitirse a lo dicho con anterioridad. Que el Comité de Garantías y Derechos del partido "tomará sus determinaciones y cuando así sea, lo manifestarán públicamente".
Así respondía a los periodistas, el portavoz regional del partido, Fernando Pizarro, tras el Comité de Dirección del PP. Pizarro ha explicado que "no alaban ningún tipo de dictadura, sea del signo que sea, y que el partido es muy garantista, por lo que habrá que esperar a la decisión del órgano competente".
El PSOE ha sido mucho más contundente. Su portavoz autonómico, Miguel Ángel Morales, ha dicho que "viendo al secretario provincial del Partido Popular en Badajoz, que participa en actos fascistas y que sus compañeros lo mantienen en el puesto, no sería de extrañar que esta semana haya recibido algún mensaje de Monago diciéndole “Juan Antonio, sé fuerte”.
Anuncian que aplicarán todas las iniciativas que vayan a ahondar en "poner en evidencia a gente que convive con el fascismo o que son conniventes con el fascismo como, el popular Morales, tras asistir éste a cenas, ágapes y exaltaciones fascistas y permitidas por su jefe de filas, José Antonio Monago".
Desde el partido no descartan la presentación de alguna propuesta propia que, además de pedir la dimisión de Morales, vaya más allá y exija al Gobierno central y a todas las instituciones que sean inflexibles con el fascismo en todos los aspectos.
Los socialistas consideran que Morales "tiene que irse de la política, tiene que dejar de ser representante democrático de los ciudadanos extremeños, porque ha insultado la memoria, la dignidad democrática de toda la ciudadanía extremeña y de todos los que se sienten demócratas".