Atraco fallido en el centro de Oviedo

Oviedo

La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 67 años que poco antes de las diez de la mañana ha entrado en la sucursal  de Bankia de la calle Uría y ha reclamado dinero a uno de los empleados, “para pagar unas deudas pendientes”, ha dicho. Ante la negativa del trabajador a entregarle el dinero, el hombre ha exhibido un dispositivo que simulaba un artefacto explosivo y ha amenazado con hacerlo estallar si no atendían su exigencia.

Mientras el subdirector de la sucursal le entretenía argumentando que no podía darle el dinero que reclamaba por estar a buen recaudo en la caja fuerte, un empleado ha activado la alarma que ha puesto en marcha el correspondiente dispositivo policial.

Según relataba a la Cadena Ser el subdirector de la oficina bancaria, el atracador era un hombre mayor de aspecto normal y que aparentaba estar resfriado por lo que cubría buena parte del rostro con una bufanda. La desagradable sorpresa se la llevó el subdirector cuando el que había tomado por un cliente más le mostró el supuesto artefacto explosivo y le exigió la entrega de todo el dinero disponible en la oficina; al explicarle que el mecanismo de retardo no permitiría abrir la caja hasta dentro de al menos media hora, el atracador se lo tomó con calma pero no exenta de amenazas; sin embargo, la rápida llegada de la Policía puso fin al tenso y desagradable episodio, según relataba el responsable de la oficina bancaria.

Los agentes desplazados han redujeron al frustrado atracador sin que ningún cliente ni trabajador del banco sufriera daños.

El atracador ha tenido además la mala suerte de que la Policía Nacional tiene desplegado un amplio dispositivo de refuerzo en la calle Uría y aledañas –todo el área comercial- coincidiendo con la campaña de compras navideñas.

El hombre ha sido trasladado a dependencias policiales para su posterior puesta a disposición judicial.