El dilema de las voluntarias de la cocina solidaria de San José Obrero

Zamora

Hay otros datos que cuestionan que haya llegado a la mayoría la recuperación económica, como se sigue proclamando desde el gobierno. Un buen termómetro es la cocina solidaria de San José Obrero, que se puso en marcha para ayudar puntualmente a vecinos del barrio en dificultades, pero que lleva ya casi 4 años funcionando cada vez con más usuarios y con una denuncia de las mujeres que cocinan para estas personas sin recursos: el malestar por estar contribuyendo a disimular la pobreza y por tanto a fomentar el discurso triunfalista del PP.

 Eso ha llevado a algunas de estas mujeres (septuagenarias de S. José Obrero, con hijos y nietos que dedican parte de su tiempo libre a cocinar 3 días por semana en esa cocina solidaria) a plantearse abandonar. Cada vez son más los usuarios que reciben desviados allí por los servicios sociales de las Instituciones. Instituciones a las que sienten estar enmendando la plana haciendo un trabajo que ellas no hacen y contribuyendo a disimular la situación de pobreza extrema en la que viven muchas familias. 

La cocina solidaria subsiste gracias a donaciones de alimentos y donaciones económicas. Con ella colaboran desde el Banco de Alimentos a Cruz Roja, pasando por Aquona, que gestiona el abastecimiento de agua en Zamora, o las panaderías El Viso, que llevan 4 años proporcionando el pan que reciben las familias sin recursos. La última donación que han recibido ha sido en metálico: que han recibido, los 2.500€ de la Asamblea Vecinal Zamora. Gracias a ese dinero, las familias beneficiarias de la cocina solidaria han podido recibir este año cestas con productos navideños.