Pacto por el Mar Menor, indignado por la petición de responsabilidades civiles y penales para quienes apoyen las enmiendas

Murcia

Pacto por el Mar Menor muestra su indignación por la petición de que se elabore un informe sobre las responsabilidades civiles y penales de quienes voten a favor de las enmiendas del Mar Menor

En una carta enviada a los diputados de la Asamblea Regional, el Pacto por el Mar Menor muestra su indignación por la carta enviada por la "Asociación para la defensa y protección de las necesidades de agua en el Campo de Cartagena"; un documento firmado por Santiago Pérez Blaya, enviado a la Comisión de Defensa y Peticiones del Ciudadano de la Asamblea Regional, en la que se pide los nombres y apellidos de los parlamentarios que voten a favor y en contra de las enmiendas, y la solicitud de un informe sobre las posibles responsabilidades civiles y penales que se podrían derivar para con los parlamentarios regionales.

Según el Pacto por el Mar Menor, el presidente de la "Asociación para la defensa y protección de las necesidades de agua en el Campo de Cartagena" pretende doblegar a través del miedo la voluntad de los representantes de los ciudadanos de la Región de Murcia.

La plataforma ciudadana también muestra su sorpresa por las noticias aparecidas estos días sobre los contactos de algunos grupos políticos con representantes de organizaciones agrarias para llegar a un acuerdo que pudiera suponer una "suavización" de las enmiendas a la Ley del Mar Menor.

Las organizaciones y asociaciones que intengran este pacto (FAVCAC, Cofradía de Pescadores de San Pedro del Pinatar, ANSE y Ecologistas en Acción Región de Murcia), consideran que las enmiendas al Decreto-Ley de medidas urgentes del Mar Menor, que tras su aprobación se convertirá en Ley Regional, será uno de los instrumentos necesarios para la progresiva recuperación del Mar Menor y su entorno, y para el cumplimiento de diversa normativa comunitaria.

Insisten en que" si no se consigue que esta iniciativa siga adelante se pondrá en juego mucho más que una parte del beneficio de un minoritario grupo empresarial. Lo que está en juego es la conservación futura del patrimonio regional representado en un espacio natural con figuras de protección nacionales e internacionales, algunas con normativa que viene siendo sistemáticamente incumplida. Nos jugamos el legado natural de nuestros descendientes, y el mantenimiento de actividades económicas sostenibles, entre las que se encuentra la propia agricultura, que saldrá beneficiada con las enmiendas consensuadas con las organizaciones sociales", señalan.