El cazorleño Lolo López Egea premio Gaudí

Cazorla

El cazorleño Lolo López Egea junto con su empresa “In Extremis” logra el premio Gaudí a los mejores efectos visuales con la premiada película “Incierta Gloria”.

La Academia del Cine Catalán organiza y otorga los premios anuales para difundir y promocionar las mejores películas, artistas y técnicos del sector cinematográfico catalán conocidos como los premios Gaudí.

En la 17ª edición de los premios que otorga El Colegio de Directores de Cine de Catalunya han competido hasta 30 películas por hacerse con el galardón que lleva el nombre de uno de los artistas más internacionales.

La película es un drama que transcurre en 1937, no es película sobre la Guerra Civil al uso. En el Frente de Aragón, en plena Guerra Civil Española. Lluís, un joven oficial republicano, destinado a un puesto temporalmente inactivo en un páramo desierto, conoce a una enigmática viuda de la que se enamora.

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En la categoría de efectos visuales “Incierta Gloria” competía en las nominaciones con “Musa”, “Proyecto Lázaro” y “Abracadabra”. La película Incierta Gloria que también fue nominada a los Goya al mejor guión adaptado y obtuvo ocho premios Gaudí.

Cazorla ya tiene un nuevo motivo de orgullo en uno de sus hijos. Y no solo porque Lolo López Egea, ha recibido el máximo galardón del cine catalán a los mejores efectos visuales, sino porque se enorgullece de ser cazorleño como demostró en la gala de los premios Gaudí. En el momento de recoger el galardón y tras los agradecimientos dedico el premio a su mujer María y a su madre para rematar con “a la gente de mi pueblo ¡viva Cazorla y viva el cine catalán!”.

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Y es que Lolo, con ese carácter afable que le caracteriza, donde todo lo que tiene de grande, pareciera competir a partes iguales en su condición de buena persona. Como hombre tímido acostumbrado a estar tras la cámara, lo de estar bajo el foco le aturde un poco. Pero se siente muy agradecido y como dijo “lo estoy viviendo con mucha alegría por mi madre, mi pueblo y mi gente”.

No se olvida nunca de sus orígenes y menos de sus comienzos que fueron en la televisión local de Cazorla. Como el mismo ha querido recordar en una entrevista “acordándome de toda mi gente de mis raíces de cuando comencé con la televisión local de Cazorla, esa referencia nunca se puede perder”, porque como ha reiterado “me siento cazorleño hasta la médula”.

Hace seis años que comenzó su aventura con Lluis Rivera y la empresa “Extremis filme services”, donde recuerda “éramos tres chavales con muchas ganas de trabajar y con mucha ilusión hemos logrado ser una empresa importante a nivel de efectos especiales “, que han trabajado no solo con producciones nacionales sino de la gran industria de Hollywood, siendo capaces de crear cualquier cosa que imaginable.

Antes de marchar a Barcelona para posicionarse en la industria del cine grabó en Cazorla una producción llamada “el ataque de los cerdos simbióticos” con un equipo catalán “una película divertida que se convirtió en mi primer proyecto de cine”, por lo que en ese momento decidió que quería dedicarse al cine.