Mirando a los ojos del gigante
El equipo que dirige Vidorreta compite en Atenas pero acaba cayendo tras la aparición final de Spanoulis
Valencia
Valencia Basket se ha rehablitado para competir después del fiasco en la fase final de la Copa del Rey de Gran Canaria. El equipo que dirige Txus Vidorreta ha vuelto a demostrar en un escenario imponente como es El Pireo que, a pesar de las bajas, tiene herramientas de sobra para acabar entre los 4 primeros en ACB y seguir mirando a los ojos de los mejores equipos del viejo continente en Euroliga.
Como ya ocurriera ante asiduos de la Final Four como Fenerbahce o Panathinaikos, el conjunto taronja vuelve a evidenciar que tiene alma y recursos baloncestísticos más que suficientes para no ser un simple convidado de piedra a la máxima competición europea. En los tres primeros cuartos, Valencia Basket fue capaz de reponerse de desventajas muy significativas. Once en el primero, (22-11), ocho en el segundo (40-32) y doce en el tercero (60-48).
El momento del zarpazo era el último periodo. Y cuando llegó la hora de consumar la táctica del conejo Will Thomas, primero, y Sergi García, después, fallaron dos triples que hubieran silenciado a El Pireo. Spanoulis hizo lo que lleva haciendo toda la vida y cerró el encuentro con una bandejita y tres tiros libres. Una pena. El alma y el baloncesto de Valencia Basket merecieron algo más.