Paradas antiacoso en el transporte nocturno de Santander
Las mujeres podrán bajarse entre parada y parada para evitar ser agredidas
Santander
Las mujeres, usuarias del transporte nocturno de Santander podrán bajarse del autobús entre parada y parada, siempre que así lo deseen para tener que caminar solas, el menor tiempo posible.
La alcaldesa, Gema Igual, ha explicado que con esta medida, que dota a las mujeres de mayor seguridad, “se quiere evitar posibles agresiones o situaciones de acoso a las que se ven sometidas, en ocasiones, las mujeres”.
La medida ya se ha implantado en otras ciudades españolas como Vigo, Tarrasa o Bilbao.
Son, las líneas que gestiona la compañía Alsa, la N-1; N-2 y N-3 que recorren la ciudad desde las 22.30h.
Un servicio que en invierno se presta los viernes y sábados, hasta las cuatro, y todos los días de la semana, durante los meses de julio y agosto.
A partir del próximo viernes, 9 de marzo, las usuarias que lo deseen “porque no se sienten seguras o porque han sufrido un episodio desagradable, de acoso, podrán pedirle al conductor que les deje a la altura de su portal y no en la parada” para evitar tener que recorren esa distancia, a solas, y por la noche.
Es decir, una mujer que coja el autobús, por ejemplo, a las tres de la mañana avisa al conductor del lugar en el que quiere bajarse, aunque no sea una de las paradas programadas.
Se trata de fijar paradas intermedias o a demanda, dentro de la ruta oficial, que permitan a las mujeres aproximarse lo máximo posible a su punto de destino y tener que caminar el menor tiempo, solas.