Luz Casal, cómo hemos cambiado
Cada canción suya es una delicia y su versatilidad no es muy común. Ahora publica nuevo disco. Prepárense para disfrutar
Luz Casal, referencia musical imprescindible en nuestro país, en una imagen de archivo. / Oscar Gonzalez / NurPhoto via Getty Images
Fuenlabrada
Para entender la versatilidad de Luz Casal podríamos decir que es una persona que empezó haciéndole los coros tanto a Juan Pardo como a los Leño y que dio sus primeros pasos en un grupo de rock para a la vez estudiar ‘bel canto’. Publica ahora su 15º disco de estudio con ‘Que corra el aire’, presentado con ‘Miénteme al oído’. Aviso: vamos a repasar una carrera discográfica apasionante que nos remonta al año 1980.
Aunque ya había publicado una pequeña maqueta, es ahora cuando el single ‘El ascensor’ ve la luz con cierta repercusión. Los aires reggae son desde luego una apuesta arriesgada para una mujer en aquella época. Fuera de los círculos de las diferentes movidas, Luz Casal demostró que tenía grandes temas que ofrecer y edita su primer LP dos años después incluyendo ‘No aguanto más’.
Poco a poco iban aumentando las ventas de una artista que, sin estridencias, era capaz de llenar un escenario con sus canciones. A mediados de la década publicó su tercer álbum donde venía este pepinazo rock y con licencia de ‘buen rollo’ llamado ‘Rufino’.
Ahora ya no era la escena nacional la única en la que se movía la gallega, que emprende giras y actuaciones por Europa y Latinoamérica. Y mientras el rock perdía protagonismo en los discos, la fuerza interpretativa de algunas letras ganaba peso. Volvemos a fijarnos en un disco impar, el quinto, que también se llamaba ‘Luz’ seguido del número, que presentaba por primera vez tres clásicos que bien merecen que escuchemos seguidos y que se han convertido en imprescindibles: ‘Loca’, ‘Te dejé marchar’ y ‘No me importa nada’. Venga, cojan aire y disfruten.
Estábamos en 1989 y Luz Casal había alcanzado la plena madurez artística. Pero lo que había conseguido era apenas nada cuando dos años después Pedro Almodóvar elige el bolero mexicano tradicional ‘Piensa en mí’, reinterpretado por la gallega en su disco ‘A contraluz’, como banda sonora de su éxito ‘Tacones lejanos’.
Casal logra doblar el número de discos vendidos y afianzar su posición en América Latina y Francia, donde ya es una considerable estrella que llena teatros. Ve claro que ése es el camino que tiene que seguir con el cambio de década, una música mucho más íntima y pausada que se materializa en el álbum ‘Como la flor prometida’, que paladeó durante cuatro años para tejer una obra maestra aderezada con canciones como ‘Entre mis recuerdos’.
Aquél fue su mayor éxito discográfico, todavía no igualado. Pero las producciones siguen siendo impecables, como la de ‘Un mar de confianza’, disco para el que deja pasar otros cuatro años, hasta 1999, y cuyo single mereció un Ondas a la mejor canción del año.
Vamos a dar el salto al nuevo milenio para encontrarnos por ejemplo en 2004 el disco ‘Sencilla alegría’, una delicia con temas realmente bellos pero con uno muy destacado: ‘Ecos’, inspirado en los atentados del 11-M y que es tan desgarradoramente bonito y tan maravillosamente doloroso que tienen permitido llorar, que no es malo.
Y nos quedan cosas por escuchar, como la forma digna y positiva en que afrontó Luz su enfermedad de cáncer a través de sus canciones y las muchas versiones en francés que le han hecho merecer el cariño de nuestros vecinos. Pero elegimos para despedirnos el álbum de 2013, ‘Almas gemelas’, con otro bonito tema llamado ‘¿Por qué no vuelves amor?’.
