La Audiencia aparta al juez Penalva de la investigación del caso Cursach

Palma de Mallorca

La Audiencia Provincial de Palma ha apartado al juez Manuel Penalva de la investigación del caso Cursach al considerar que ha perdido la apariencia de imparcialidad. Más de una treintena de abogados de investigados en la causa suscribieron una petición de recusación del juez impulsada por la defensa de Bartolomé Sbert, número dos de Cursach. La fiscalía anticorrupción apoyó la petición de apartar al magistrado alegando que podría haber perdido la imparcialidad a raíz de la interpretación de las conversaciones mantenidas a través de mensajes telefónicos con una testigo del caso.

En la resolución, los jueces de la Audiencia sostienen que las expresiones proferidas por el magistrado en el transcurso de las conversaciones por watsapp que mantiene con una de las testigos comprometen su aparicencia de imparcialidasd. Afirman que este hecho debilita su capacidad de generar cofianza entre las partes y la sociedad respecto a su posición como tercero.

No se trata de analizar si el magistrado ha perdido su imparcialidad, dicen los jueces, sino su posiciión institucional en el proceso como tercero ajeno e indiferente en la instrucción. Insiste la resolución de la Audiencia en que no se ha cuestionado la profesioanlidad del recusado ni su capacidad para la independencia y la imparcialidad. La sección primera de la Audiencia también subraya que no se ha advertido que las decisiones tomadas por Penalva hayan venido dadas por una predisposición anímica contra los investigados y sus defensores que le atribuyen quienes han pedido su recusación.

Los datos probados en el incidente de recusación, dicen los jueces, permiten afirmar que la apariencia de imparcialidad de Penalva para continuar instruyendo la pieza principal y las separadas no superan el estandar objetivo, lo que les conduce a aceptar la recusación y apartar al juez de la investigación.

El magistrado ha quedado pues apartado de la investigación, que será asumida por el magistrado de instrucción número seis de Palma, Miquel Florit, que es quien asumió el caso mientras se resolvían las peticiones de recusación y quien por turno de reparto y organización ha sustituido siempre al magistrado. Penalva llevaba al frente de la instrucción de este asunto unos tres años y ha dejado la investigación a punto de finalizar y con algunas piezas separadas a punto de llegar a juicio.