Una víctima acusa a los “falsos médicos” de haberla tratado junto a sus hijos

Castellón

Una de las víctimas que ha declarado este miércoles en el juicio contra los dos "falsos médicos" que están siendo juzgados en la Audiencia Provincial de Castellón ha afirmado que trataron a sus hijos y a ella misma en Vinaròs y les diagnosticaron enfermedades que podían, incluso, causar la muerte.

Así lo ha manifestado una de las víctimas que ha testificado en el juicio que comenzó este martes en la Audiencia y donde se juzga a dos supuestos falsos profesionales por delitos de intrusismo, estafa y contra la salud pública, así como doce delitos de lesiones.

La Fiscalía pide para los acusados 19,5 y 23,5 años de prisión y 8 años y 5 meses para la esposa de uno de los propietarios de la clínica de Vinaròs en la que ocurrieron los hechos entre 2006 y 2009, por delitos de estafa e intrusismo.

El juicio comenzó con la declaración de los acusados, quienes defendieron ser homeópata y médico y aseguraron que no practicaron tratamiento médico alguno en Vinaròs.

Uno de los acusados es el conocido como "falso médico" que poseía una clínica en la localidad coruñesa de Ferrol en la que supuestamente trató a 145 pacientes sin poseer la titulación de medicina, en un proceso que está a la espera de juicio.

Una de las víctimas y su marido han declarado este miércoles en calidad de testigos.

Ella ha explicado que el acusado que poseía la clínica en Vinaròs -y que le realizaba tratamientos homeopáticos con frecuencia- le dijo que se iba a incorporar al centro "un médico muy bueno de mucho renombre que trabajaba en Londres".

Este "médico" la visitó a ella y le diagnosticó un problema de tiroides tras practicarle él mismo una biopsia en la zona y también le dijo que podía ser diabética en el futuro.

Asimismo ha afirmado que trató a su hijo -tras analizar una radiografía- y le diagnosticó "enfermedad de Chiari" al verle una "depresión en la zona de la nuca" que "podía llegar a matarlo cuando tuviera 18 o 20 años". Le propusieron realizar al niño un tratamiento con células madre en Sevilla con un coste de 12.000 euros, según ha manifestado.

La hija de la testigo, que padecía hiperactividad, fue igualmente tratada y le dijeron al padre de la misma que "podía padecer un retraso mental en el futuro".

El padre de los niños ha explicado igualmente que él recibió una inyección en la garganta por parte del propietario de la clínica que le causó una gran hinchazón que tuvo que ser tratada en un hospital.

También ha declarado una de las empleadas de la clínica, una esteticista, que ha explicado que a ella misma le realizaron una "liposucción" los dos acusados junto a la doctora de origen brasileño que entonces trabajaba en la clínica y que debía haber comparecido este miércoles en calidad de testigo pero no ha podido ser localizada.

Además, ha declarado como testigo un odontólogo que trabajaba a tiempo parcial en la clínica y quien ha dicho que el acusado gallego -quien le fue presentado como neurocirujano- diagnosticó fibromialgia a su madre.

En la sesión han declarado también los inspectores de sanidad que participaron en el registro de la clínica, quienes han dicho que encontraron medicamentos caducados y algunos no autorizados.

También lo ha hecho el director de la secretaría de doctorado de la Universidad de Sevilla, quien ha dicho que la formación del "falso médico" gallego "no le permitía ejercer como médico".

El catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Sevilla ha afirmado que fue requerido por el "falso médico" -a quien conoció por un amigo común- para que evaluara su tesis universitaria y más tarde comprobó que ésta "era un plagio al 100 % de una tesis presentada en Finlandia"