Miles de personas marchan contra la calificación de terrorismo de los sucesos de Alsasua
El lunes arranca en la Audiencia Nacional el juicio por la agresión a dos guardias civiles y sus parejas en 2016
Pamplona
Más de hora y media de recorrido por las calles de Pamplona con una asistencia de 50.000 personas, según los organizadores, que la Delegación del Gobierno en Navarra rebaja a 35.000. Cifras de la manifestación que han convocado las familias de los 8 acusados de la agresión a dos guardias civiles fuera de servicio y sus parejas en un bar de Alsasua la madrugada del 15 de octubre de 2016 y con la que querían pedir que el suceso se juzgue en un tribunal ordinario. El próximo lunes los 8 se sentarán en el banquillo de la Audiencia Nacional acusados de delitos de terrorismo.
Encabezada por unas letras de 3 metros de alto que formaban la palabra “Justizia”, la manifestación terminaba en la Plaza del Castillo de Pamplona en la que Gotzon Urrizola y Belén Pozueta, dos de los padres de los acusados agradecían la asistencia “a uno de los actos más multitudinarios de las últimas décadas en Navarra”. 3 de los acusados están en prisión provisional desde noviembre de 2016, cuando el caso fue reclamado por la Audiencia Nacional al juzgado de Instrucción de Pamplona que lo estaba investigando. “No pedimos impunidad, exigimos justicia”, remarcaba Pozueta, madre de uno de los encarcelados. Los 8 jóvenes, 7 hombres y una mujer, se enfrentan a peticiones de pena que van desde los 62 a los 12 años de cárcel. Los familiares reconocían que “son hechos que nunca debieron ocurrir”, pero señalan que en 2016 se produjeron 9.571 casos de agresiones a agentes de la autoridad en España y sus hijos “ya han cumplido más tiempo en la cárcel que los 9.570 casos restantes”.
La convocatoria contaba con el respaldo de la mayoría del Parlamento de Navarra, que el pasado lunes aprobó una declaración institucional llamando a la participación, con los votos de Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e IE y la oposición de UPN, PP y PSN. También respaldaba la manifestación el Gobierno foral, representado por la consejera portavoz, María Solana, en la marcha, así como el Ayuntamiento de Pamplona, representado por el alcalde Joseba Asirón (EH Bildu). La presidenta, Uxue Barkos (Geroa Bai), no ha asistido, pero reclamaba en una entrevista en la Cadena SER que “no se aplique el código penal en función del código postal” solicitando a la Justicia “proporcionalidad para unos hechos que habitualmente se dirimen en un juicio de faltas”. Al inicio de la marcha, el alcalde de Alsasua, Javier Ollo (Geroa Bai) ha destacado la pluralidad de quienes apoyaban la convocatoria: “Tenemos diferencias a la hora de valorar estos hechos, pero hay un elemento que nos une: que estos hechos no se pueden calificar como terrorismo".
Cargos de los 4 partidos que apoyan al ejecutivo navarro y representantes de los sindicatos Comisiones Obreras, ELA y LAB han realizado el recorrido varias filas detrás de la cabecera, ocupada por familiares de los acusados. La petición de que se retire la calificación de terrorismo a los sucesos de Alsasua también ha contado con el respaldo de “88 diputados de 8 partidos diferentes y 52 europarlamentarios”, según señalaban Urrizola y Pozueta. También se sumaba a esa solicitud Amnistía Internacional. El presidente de la Sección Española de esa organización, Esteban Beltrán, considera que esta calificación se debe a “la vaga definición del terrorismo en el Código Penal”.
Los hechos se produjeron la madrugada del 15 de octubre de 2016 cuando dos guardias civiles y sus parejas disfrutaban de la noche de Ferias de Octubre en Alsasua y fueron rodeados y agredidos por un grupo en el Bar Koxka de esta localidad. Uno de los agentes sufrió la rotura de un tobillo. Según la fiscalía, la agresión se enmarca en una estrategia para amedrentar a las Fuerzas de Seguridad del Estado. El próximo martes, varias organizaciones de víctimas del terrorismo han convocado una concentración de apoyo a los agentes agredidos.