Sanidad consiente que Quirón acapare el negocio de la reproducción asistida
Los hospitales Rey Juan Carlos de Móstoles, el Infanta Elena de Valdemoro y el Hospital de Villalba, todos gestionados por el grupo Quirón Salud, son algunos de los más demandados para realizar procesos de Reproducción Asistida pese a que, según la memoria del Servicio Madrileño de Salud, no cuentan con esta especialidad en su cartera de servicios y, por tanto, no pueden ofertarla
Los tres hospitales que gestiona el grupo Quirón Salud llevan años ofreciendo en su cartera, servicios de Reproducción Asistida que finalmente realiza la Fundación Jiménez Díaz, la matriz del grupo. Estos procesos han sido facturados a la consejería de Sanidad camuflados como pacientes de libre elección. El responsable de permitir esta sangría a las arcas públicas, el Director General de Asistencia Sanitaria, César Pascual, está imputado en el caso de las ambulancias Alerta.
Según datos de la consejería de Sanidad, en la Comunidad hay seis hospitales públicos que realizan tratamientos de reproducción asistida: La Paz, el Clínico, Gregorio Marañón, 12 de Octubre, Hospital de Alcorcón y Príncipe de Asturias; y sólo uno de gestión privada: la Fundación Jiménez Díaz. El pasado año los seis públicos atendieron en total a a 3.146 parejas; la Jiménez Díaz, un sólo hospital, a 2.909 parejas. Casi la mitad del total de la comunidad de Madrid. Exactamente el 48%.
Estos centros se han aprovechado de la abultada lista de espera de otros hospitales de la red pública para captar pacientes, sabiendo que el tiempo juega en su contra. Y todo esto ha ocurrido sin que Quirón haya solicitado permiso para ampliar su cartera de servicios y poder ofrecer esta especialidad. Como reconoce el César Pascual, en declaraciones a la SER "el dinero sigue al paciente". En este caso el dinero sale del Servicio Madrileño de Salud y lo reciben los centros de gestión privada con, hasta ahora, la complicidad de la propia consejería. Son tratamientos que cuestan miles de euros por paciente (Fecundación In Vitro 3.500 euros)
Pacientes derivadas
"Fue el teléfono de gestión de citas de la Comunidad el que me ofreció la posibilidad de realizar el tratamiento en el Rey Juan Carlos (Quirón)", nos ha contado Marta. Ella se enteró, por su médico del 12 de Octubre que iba a necesitar reproducción asistida y decidió buscar el hospital en el que tuvieran la lista de espera más baja porque "El tiempo en estos casos es fundamental porque cuanto mayor eres, menos posibilidades tienes".
El Hospital de referencia de Lucía es el de El Escorial. Como no tiene especialidad de reproducción asistida decidió solicitar la libre elección al Hospital de Villalba (Grupo Quirón) "porque en su web decía que contaban con este servicio, me queda más cerca de casa y apenas tenían lista de espera. Es un sistema cómodo, las consultas las tenemos aquí y nos desplazamos a la Fundación Jiménez Díaz para el trabajo de laboratorio."
Esther eligió directamente el Hospital Rey Juan Carlos porque le dijeron que tenía una lista de espera muy baja. "Lo primero que nos dijeron es que nos teníamos que dar de alta en el portal de atención al paciente del Grupo Quirón. A partir de ahí nos van gestionando las citas y las pruebas que nos tenemos que realizar en la Fundación Jiménez Díaz. Es en este centro donde también se congelan y se conservan los embriones viables para futuros tratamientos". (La vitrificación de los ovocitos y su mantenimiento durante un año ronda los 1.500 euros por paciente)
Uso abusivo de la libre elección
Hace dos meses, sin previo aviso, la consejería de Sanidad emitió una orden para frenar lo que, en palabras del Director General de Asistencia Sanitaria, César Pascual, se trataba de un "uso abusivo de la libre elección". Un uso que él mismo permitió, al menos desde 2015 - desde que asumió su cargo- y que sigue justificando, con respuestas vagas y contradictorias, cuándo le preguntamos cómo es posible que esto haya ocurrido. "Nosotros sabemos que los tratamientos se realizan en la Fundación Jiménez Díaz, aunque el paciente pertenezca a otros hospitales del grupo Quirón, pero eso no es ilegal. Ellos pueden ofertar que tienen consultas de reproducción asistida y fertilidad aunque no realicen los tratamientos". Este razonamiento bordea la legalidad y las propias instrucciones del Servicio Madrileño de Salud, que obligan a los hospitales concesionados a pedir permiso a la consejería en el caso de que quieran ampliar su cartera de servicios. Una norma que no se ha aplicado en los hospitales de Quirón Salud, pero sí en el de Torrejón que depende del grupo Sanitas.
Doble rasero
En octubre de 2016 en la comisión mixta entre el SERMAS y el hospital de Torrejón (SANITAS), el centro pide oficialmente la ampliación de su cartera de servicios para poder realizar procesos de inseminación artificial, que es el la técnica más simple de la reproducción asistida: "Tras realizar todas las inversiones necesarias y la dotación humana exigida", dice el acta "hemos presentado una propuesta de ampliación de la cartera de servicios, pretendiendo iniciar la asistencia de pacientes dentro del campo de la reproducción humana asistida, concretamente en el proceso de inseminación artificial". La consejería responde que la propuesta "se encuentra pendiente de resolución por parte de la Dirección General de lnspección y Ordenación previo informe de la Dirección General de Coordinación de la Asistencia Sanitaria, en manos de César Pascual, que está pendiente de entrega.
Pese a todo, César Pascual insiste en que los hospitales de Quirón no necesitan ese permiso y que la comunidad no está perdiendo dinero: "Esto no es un cuestión de flujo económico, porque si una paciente de La Paz se va al hospital de Villalba para hacerse un tratamiento de fertilidad lo único que pasa es que La Paz lo deja de hacer". Lo que omite este alto cargo, es que el Servicio Madrileño de Salud paga los tratamientos de los pacientes que por libre elección se marchan a un hospital de gestión privada a precio público menos el 10%.