La restauración de San Pedro de Montes y el polideportivo de Villacelama, premiados por su arquitectura

León

Dos proyectos leoneses han resultado galardonados en el marco de los X Premios de Arquitectura de Castilla y León. Se trata de la restauración del monasterio de San Pedro de Montes, ejecutada por el arquitecto Eloy Algorri, y la construcción del Polideportivo de Villacelama, obra del estudio leonés Quirós Presa. 

En concreto, la rehabilitación de San Pedro de Montes ha conseguido hacerse con el premio en la categoría de obras de restauración. Se trata de un ambicioso proyecto, emprendido por la Fundación Hospital de la Reina, ligada al rectorado de la basilica de La Encina. Sufragada con fondos propios, del ministerio de Fomento y de la Junta de Castilla y León, la restauración supuso una inversión carcana al millón de euros. El proyecto diseñado y coordinado por el arquitecto leonés Eloy Algorri, que se ejecutó en aproximadamente diez meses de obras, contemplaba la restauración del ala este de este edificio que habitualmente formaba parte de la lista de Hispania Nostra de patrimonio en peligro. La idea con la que se rehabilitó fue crear un espacio para albergue y para acoger también actividades socioculturales.

El jurado ha destacado de este proyecto "su acierto a la hora de resaltar la arquitectura ya existente por medio de unos detalles muy cuidados" así como "la integración de las nuevas superficies en un paisaje excepcional y con una actitud innovadora".

Ampliar

En cuanto al polideportivo de Villacelama, este proyecto ha logrado un accéssit en la categoría de 'Otros edificios de nueva planta'. Ejecutado por los arquitectos Itziar Quirós Urdampilleta y Pablo López Presa, el pabellón (uno de los edificios más importantes para condensar la vida en los pueblos) buscó el objetivo de ser lo más sostenible posible con el mínimo impacto visual con el entorno. Así, se pensó también en aprovechar al máximo la luz natural para dar la sensación de que se estaba al aire libre a pesar de estar en el interior del polideportivo.

En este caso, el jurado ha destacado "la gran limpieza del edificio, su precisión estructural y constructiva" así como "la buena adaptación a un entorno complejo".