Ultimátum para que Romaní no esté en la comisión de Aguas de Cádiz

Cádiz

O Ignacio Romaní se va o no habrá comisión de investigación en Aguas de Cádiz. Ese es el ultimátum que van a dar este lunes en el consejo de administración de la empresa pública gaditana Podemos, Ganar Cádiz y PSOE. Estos tres partidos exigirán al PP que elija a otro representante en esa comisión que no sea Romaní, ya que la comisión tiene por objetivo investigarle a él y el destino del dinero público que entregó al observatorio que presidía el que era director de su tesis universitaria. De lo contrario, si Romaní permanece, los tres partidos disolverán la comisión de investigación y acudirán directamente al juzgado.

De esta forma, Ignacio Romaní no podrá formar parte de la comisión de investigación que Aguas de Cádiz ha creado para intentar aclarar el destino de 42.000 euros de dinero público que fueron a parar a un observatorio que dirigía el entonces director de tesis universitaria del concejal del Partido Popular. En eso coinciden Podemos, Ganar Cádiz y PSOE los tres partidos con representación en el consejo de administración de la empresa pública, además del PP.

Cada partido podía proponer un representante en esa comisión de investigación y los populares decidieron que fuera Romaní en nombre del PP. Una decisión que ha indignado al resto de partidos puesto que supone que quien es objeto de investigación también es "juez" del proceso. Los técnicos de Aguas de Cádiz han dicho que el PP puede proponer a quien quiera, incluido Romaní. Es legal, pero no ético, según Podemos, Ganar Cádiz y PSOE, de ahí que hoy le darán ese ultimátum. O se marcha de la comisión o no habrá comisión.

Si no se marcha, por tanto, se irá directamente al juzgado. Los servicios jurídicos de Aguas de Cádiz están analizando si este caso podría ser constitutivo de delitos de prevaricación, fraude o malversación de caudales públicos. Hay que recordar que entre 2011 y 2015 Ignacio Romaní autorizó pagos de 42.000 euros al observatorio de responsabilidad social que dirigía Carlos Guillén, el director de su tesis.

En principio, Guillén pidió dinero para una investigación muy similar al contenido de la tesis de Romaní, aunque desde que saltó este escándalo ambos se han afanado en explicar que la tesis por la que se doctoró el concejal del PP y el supuesto trabajo que finalmente hizo Guilén con ese dinero no tenían nada que ver. Explicaciones llenas de contradicciones que han llevado a Aguas de Cádiz a exigir ambos toda la documentación presentada hasta ahora.

El consejo de administración de Aguas de Cádiz se ha convocado para las seis de la tarde de este lunes.