De rebote

Soria

La concesión de determinadas partidas significativas a cambio del apoyo a los presupuestos generales del Estado es una vergüenza. A los nacionalistas vascos del PNV les caen llovidos del cielo otros 500 millones para infraestructuras, ya que parece que no habían tenido suficiente en las últimas décadas. Los canarios también tendrán más de trescientos millones de euros por arropar al gobierno y, claro, los navarros, visto el panorama, dicen que para su comunidad foral, como tampoco tienen privilegios sobre el resto del país, también quieren favores de ese tipo.

Así las cosas, UPN también ha conseguido una serie de partidas entre las que se encuentra la inversión en los próximos dos años de veinte millones de euros en la A 15 y la licitación del tramo entre Ágreda y Matalebreras, de ocho kilómetros. Vamos, que a Soria nos llegan de rebote los favores del gobierno de España a otra comunidad como la navarra para licitar unos pocos kilómetros de una autovía que se viene demandando desde estas tierras castellanas hace más de treinta años. Claro, el problema es que aquí no podemos apoyar ningún presupuesto. No servimos de bisagra para aprobar presupuestos o gobernar este país. Nosotros no somos ni vascos, ni navarros, ni canarios. Sólo somos sorianos. Muy simpáticos, gente seria, honrada y trabajadora, pero eso no sirve de nada en esto de la política. Somos ciudadanos de tercera división.