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Cáritas Diocesana

Caritas destina una residencia de monjas a acoger trabajadores de temporada

El año pasado se ayudó a 1.715 personas de las que casi un 60% eran de nacionalidad española

Francesc Conesa y Guillem Ferrer explicaron la memoria de Càritas de 2017. / Jordi Ribera

Mahón

El problema de los alquileres en Menorca va al alza y aún es peor para los trabajadores de temporada. Para facilitarles un techo Cáritas ha tomado una decisión poco habitual.

Cáritas anunció este jueves que pondrá a disposición de trabajadores de temporada que no puedan acceder a una vivienda un edificio en Ferreries. Se trata de una residencia de monjas que se ha habilitado para albergar temporeros a un precio social.

Los alquileres en Menorca están llegando a extremos como que una noche en una furgoneta cuesta 110 euros o roulottes sin vehículos a 30 euros por día.

El anuncio del obispo Francesc  Conesa llegó durante la presentación de la memoria de Cáritas del año pasado en que se atendieron a un total de 1.715 personas. Son un poco menos que en 2016, pero necesitaron más ayuda que las de un año antes. El 60% de personas necesitadas eran mujeres y un 57% del total eran de nacionalidad española que, en muchos casos, ya habían agotado cualquier ayuda o recurso familiar. La mayoría de gente que acoge a Cáritas lo hace diciendo que no tienen trabajo, están a punto de perder la casa y tampoco pueden comprar comida.

 
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