Barreras que impiden el aprendizaje

Decía Antonio Machado que “los que están siempre de vuelta de todo son los que no han ido a ninguna parte”. Una frase que nos hace pensar y valorar a dónde podemos llegar aprendiendo de los demás, porque según reconoce Fernando Álvarez, coach y entrenador emocional (www.sermadridsur.com), “siempre hay que aprender del otro”, aunque hay barreras que a veces nos lo impiden. Y no se refiere a obstáculos socio-económicos para formarnos mejor, sino a las barreras que nos ponemos a nosotros mismos a la hora de sacar partido y aprendizaje de las situaciones que vivimos o de lo que nos trasmiten los otros.

A veces la soberbia o la falta de autoestima nos impide aprender de otra persona. “Podemos llegar a pensar que el otro no es nadie para enseñarnos a nosotros, que nuestra preparación es superior o que no tiene categoría para aprender nada de él. Y nos equivocamos”, dice Álvarez.

Tener una escucha proactiva, humilde y no sentirnos menos por reconocer que lo que nos cuentan nos descubre un mundo o una información desconocida, siempre nos hará crecer. “Es importante tener los ojos y la mente abierto para no empobrecernos”.