YMCA Toledo estrena nueva sede para mejorar sus programas de familia, juventud y empleo
Al acto ha asistido la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez
La consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez junto a trabajadores de YMCA y otras personalidades que han asisitido al acto / JCCM
Toledo
YMCA Toledo ha inaugurado su nueva sede en Toledo. Se trata de una organización comprometida en fortalecer, acompañar y dar herramientas a los jóvenes para que, con ellos y desde ellos, mejoren la sociedad. Actualmente YMCA está presente en 119 países y ayuda a 58 millones de personas.
En Toledo, llevan más de 30 años trabajando y acaban de inaugurar nueva sede. Un estreno en que ha participado el Gobierno de Castilla-La Mancha a través de la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, que ha querido dar la "enhorabuena a la entidad, a su profesionales y a sus voluntarios por hacer la vida más fácil a aquellas familias que, a veces, lo tienen más difícil”.
La consejera, Aurelia Sánchez ha conocido las nuevas instalaciones de la entidad / JCCM
La consejera, Aurelia Sánchez ha conocido las nuevas instalaciones de la entidad / JCCM
La consejera ha estado acompañada del director de YMCA en Toledo, Gonzalo López; de la directora general de Atención a la Dependencia, Ana Saavedra; del viceconsejero de Empleo, Francisco Rueda y del concejal de Urbanismo y Promoción Económica del Ayuntamiento de Toledo, Teo García, entre otras personalidades.
Aurelia Sánchez ha asegurado que la Junta subvenciona diferentes proyectos de esta entidad, principalmente, con cargo a la gestión del 0,7 % por ciento del IRPF dirigidos a lograr la mejora de la empleabilidad y a la atención de la infancia, la juventud y la familia, entre otros fines.
La consejera ha añadido que "vamos a seguir colaborando conjuntamente el Gobierno de Castilla-La Mancha con entidades de intervención social como YMCA”, además, ha destacado que las nuevas instalaciones “van a permitir que se haga mejor el trabajo de profesionales y usuarios que vienen cada día”. En YMCA Toledo, trabajan 22 profesionales que atienden anualmente a unos mil usuarios, “niños y adultos que tienen necesidades de atención social”, ha explicado.
La entidad cuenta con un presupuesto que asciende a 750.000 euros, la mitad de los cuales los aporta el Gobierno de Castilla-La Mancha.
