El PPdeG al borde de un ataque de nervios

Santiago de Compostela

Hay quien ha perdido el sueño ante la incertidumbre que se abre a un año de las municipales; hay quien tantea sus posibilidades como sucesor de Alberto Núñez Feijoo al frente del PPdeG y de la Xunta y hay quien intenta trasladar en vano que lo que está ocurriendo no provoca inquietud en las filas populares.

La sucesión de Mariano Rajoy y la posibilidad cierta de que Feijoo se postule para ella está mediatizando la vida del partido y del gobierno gallego. Cada día se amplía un poco más la lista de integrantes del banquillo popular en la comunidad autónoma. Si hace apenas una semana los únicos que estaban en boca de todos eran el vicepresidente, Alfonso Rueda y el portavoz parlamentario, Pedro Puy, la lista se va ampliando con nuevos nombres como el de Diego Calvo, el presidente provincial del PP en A Coruña o incluso su homólogo en Ourense, José Manuel Baltar.

Los primeros movimientos de algunos de estos aspirantes han enfadado a aquellos del partido que apuestan por relajar los ánimos y la tensión del momento. La preocupación de la mayoría es la posibilidad de perder el gobierno de la Xunta sin Núñez Feijoo como cabeza de cartel después de tres incontestables mayorías absolutas. 

En las filas populares contienen el aliento mientras Feijoo deshoja la margarita y valora los apoyos y las garantías que se le ofrecen. La viceportavoz parlamentaria, Paula Prado, asegura que el grupo popular está viviendo "con tranquilidad" este delicado momento. Todo apunta a que el presidente de la Xunta y del PPdeG está meditando qué hacer con el mismo hermetismo con el que tomó otras decisiones como la de presentarse por tercera vez a la presidencia de la Xunta; un calvario para los suyos ante una prematura sucesión en Galicia que hasta hace dos semanas no estaba sobre la mesa.