Estas tres circunstancias auguran la suma de nuevos viajeros al metro de Granada

Granada

La Consejería de Fomento cree posible superar los 11 millones de usuarios del metro de Granada, que es la previsión para el primer año de funcionamiento, dado que se espera de forma inminente una mayor demanda en las paradas de la estación de trenes y la de Juncaril. Si a eso se unen los transbordos gratuitos desde el autobús, las cifras podrían ser incluso mejor.

La Junta ha confirmado a Radio Granada las buenas expectativas para el metro de Granada, cuyo uso ha mejorado las previsiones iniciales.

A punto de cumplise los nueve meses de funcionamiento, el metro alcanzará su velocidad comercial en pocas semanas, como este martes adelantó Radio Granada, y ya se estudia cómo mejorar el servicio, incluso con la compra de nuevos trenes para unirlos a la flota actual. Eso permitiría incluso llegar a una frecuencia de paso de 7 minutos. Ahora está en los 9 y en pocas semanas alcanzará el objetivo de los 8 minutos de paso.

La Consejería de Fomento cree que se pueden mejorar las actuales cifras de uso el metro, que están siendo, incluso, mejores de lo esperado.

Si la reconexión ferroviaria se produce a medio plazo, la estación intermodal de Andaluces del metro, que ahora tiene un uso testimonial, se convertirá en uno de los referentes de la línea. Además, el metro espera que la estación de Juncaril se convierta en otro referente a partir de julio. El próximo mes se abrirá el gran aparcamiento disuasorio construido por el metro para coches. Como en los primeros meses el parking será gratuito, se espera un gran uso como conexión de nuevos usuarios con el metro.

El sistema espera, además, otro tercer empujón, también en julio, con la entrada en servicio de los transbordos gratuitos desde el autobús en los cuatro municipios de su recorrido.

Con estas nuevas incorporaciones, el metro podría superar los 11 millones de usuarios que es la meta fijada por la Junta para el primer año de funcionamiento. Por tanto, hay margen para crecer en un periodo que en todos los sistema similares se entiende de adaptación.

De hecho, aún queda por solventar un problema recurrente: los fallos en las canceladoras de billetes y que estas admitan tarjetas de crédito como pago. Como adelantamos en la SER, la Consejería ya ha calculado que con tres trenes más, que habría que encargar de forma inmediata, el metro podría dar un salto y aumentar la prestación en cantidad y calidad de servicios.