"Vengo a un club que no tiene techo"

León

El banquillo de la Cultural seguirá ligado al sello de la juventud, la ilusión y la máxima ambición, la que impone el escenario y la que traen Víctor Cea y sus cinco ayudantes para devolver al equipo a la categoría perdida. Sin llegar a mencionar la palabra "ascenso", el técnico madrileño no esconde el final del camino, aunque enfatizó en respetar los procesos y la exigencia de la Segunda División B.

En su intervención de apertura, Cea lo tiene claro: "creo que vengo a un club que no tiene techo, no tiene límite y es muy ambicioso. A partir de ahí somos responsables de crecer con él lo más posible". Para ello, ilusión y trabajo, "como la vida misma" y mucho tiento a la hora de manejar el grupo de jugadores, en el que, tal vez, se den cabida numerosos futbolistas que proceden de la Segunda División.

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Al respecto, Cea no duda: "hay un bloque de jugadores que pueden ser muy importantes entendiendo el lujo que es pertenecer a esta familia y queremos retener a la mayoría, siendo ellos los primeros que generen ilusión y que tengan mentalidad de familia y humildad". La confección del plantel será una de las tareas para perfilar un concepto de fútbol ofensivo para el que las dimensiones del Reino de León serán una bendición. A partir de ahí, "la Cultural tiene un bagaje, una experiencia y unas señas de identidad a nivel humano, deportivo y de idea de juego y somos responsables de darle continuidad. Evidentemente cada cuerpo técnico tiene sus matices, pero siendo fieles a esas señas".