Cimavilla lamenta el estado sucio y deteriorado de la calle Vicaría recién remodelada

Gijón

Tras cuatro meses de obras y sin inauguración oficial, la calle Vicaría de Gijón ya está abierta al tránsito desde el pasado mes de junio, sin embargo los vecinos del barrio se muestran descontentos y decepcionados con el estado que presenta la nueva vía: suciedad acumulada, las tapas de las alcantarillas oxidadas y una señal que prohíbe la circulación de coches que dificulta los acceso de los vecinos a sus viviendas.

Las obras, pertenecientes a los presupuestos participativos, se iniciaban a finales del mes de enero y eran muy celebradas por el vecindario, ya que Vicaría era una de las arterias del barrio que más dificultades presentaba al tránsito con adoquines y estrechas aceras. Su eliminación y la conversión en una plataforma única al mismo nivel para peatones y vehículos fue, no solo propuesto por los propios vecinos, sino que además suponía la primera experiencia en este sentido que podría servir de modelo para el futuro Plan de Movilidad.

Sergio Álvarez, presidente de la Asociación de vecinos Gigia Cimavilla, ha estado en Hoy por Hoy Gijón.